La gente de Catar está nerviosa pero quiere hacer las cosas bien ante Senegal en su Mundial este viernes 25 de noviembre a las 9:00 de la mañana.
Es muy probable que el Mundial vaya de mal en peor para la selección de Catar si sus jugadores no se calman cuando se enfrenten a Senegal, campeona de África, en su segundo partido de la fase de grupos.
Los cataríes son ya los primeros anfitriones que pierden el juego inaugural de un Mundial, luego de caer por 2-0 frente a Ecuador en el Grupo A el domingo 20, en el mayor evento deportivo del país.
Esto los pone en peligro de convertirse también en el segundo de ser sede, desde Sudáfrica en 2010, que cae eliminado en la primera ronda.
¿Qué pasa si pierden todos los partidos?. ¿O con la triste perspectiva de no anotar ni un sólo gol en su Mundial?. Eso aumentaría las críticas a la decisión de la FIFA de conceder la Copa del Mundo al pequeño pero adinerado emirato del Golfo Pérsico, que nunca había clasificado para el mayor torneo del fútbol antes de conseguir el derecho a organizarlo hace 12 años.
“Quizás nos sentimos un poco abrumados por la responsabilidad. También estábamos nerviosos”, dijo el seleccionador de Catar el español Félix Sánchez. “Espero que tengamos menos presión (contra Senegal) y que podamos afrontar el juego de una forma más competitiva. Creo que es algo en lo que podemos trabajar».
La próxima oportunidad de Catar para demostrar que merece un lugar en el escenario mundialista será el viernes 25 contra Senegal, un equipo formado por jugadores de las mejores ligas -Inglaterra, España, Italia y Francia-, que no tiene a su estrella el lesionado delantero Sadio Mané.
“Tenemos mucho margen de mejorar», señaló Sánchez luego que sus jugadores se quedaran paralizados ante el escrutinio global frente a Ecuador: El 2-0.
AP