Ya pareciera que no hay manera de describir aquello de lo que es capaz de hacer Shohei Ohtani en un terreno de juego de béisbol, y más aún en instancias decisivas, habiendo logrado igualar ahora el récord de más extrabases conectados en un duelo de Serie Mundial, establecido hace más de 115 años, revive el portal “Meridiano”.
Los Azulejos de Toronto y los Dodgers de Los Angeles se hallaban ya para ese momento igualados 5-5 en el tercer desafío de la Serie Mundial, y eso se debe a la superlativa actuación del fenómeno japonés, quien acumulaba ya tres rayitas impulsadas.
NOCHE PERFECTA, HASTA ESE MOMENTO
«Showtime» empezó el compromiso con un doblete, mientras que en su segundo turno castigó a Max Scherzer con un bambinazo solitario, comenzando a escribir lo que sería su noche histórica.
De allí, pasó a una tercera aparición en la que repitió con un tubeyote, éste también remolcador, y, sorprendentemente, en su cuarta oportunidad, volvió a irse para la calle por la banda contraria, un bambinazo que emparejó las cosas parcialmente 5-5 y que le permitió sumar un nuevo hito en su impresionante carrera.
RÉCORD ESTABLECIDO EN 1906.
Con sus cuatro extrabases de la noche de este lunes 27, Ohtani igualó a Frank Isbell, quien, en 1906 , con los Medias Blancas de Chicago se convirtió en el pelotero con más batazos de más de una almohadilla en un desafío de instancia decisiva, tras batear cuatro dobletes.
Esto quiere decir, que incluso la hazaña del nipón pudiera considerarse superior, debido a que, de sus cuatro extrabases, dos fueron cuadrangulares, algo nunca antes visto en esta instancia (RG).