El jardinero venezolano Ronald Acuña Jr. ahora debe ser cuidado por los Bravos de Atlanta, porque en realidad hace falta y lo necesitan para los playoffs de la Liga Nacional, porque son segundos a tres juegos de los Mets de Nueva York y delante de los Filis de Filadelfia por 6.5 en la División Este.
El criollo de 24 años regresó al lineup el miércoles 31 de agosto y el jueves 1 de septiembre, luego de ausentarse durante tres partidos consecutivos. Sería inteligente de parte de su novena darle días de descanso en lo que resta de la temporada regular, dado a que aún padece molestias en la rodilla derecha.
¿Por qué sigue Acuña Jr. adolorido más de un año después de operarse para reparar un ligamento desgarrado en la rodilla derecha?. No está claro, pero discutirlo no va a ayudar a los Bravos a ganar una segunda Serie Mundial en forma sucesiva. Pero darle al Junior tiempo para recuperase sí los puede beneficiar.
El guaireño ha demostrado que puede ser el jugador de Grandes Ligas más emocionante y lo demostró cuando salió de la lista de lesionados, ya que bateó .316 con seis jonrones y 11 bases robadas (en 14 intentos), a la vez que disputó 31 de 41 juegos de los Bravos del 28 de abril al 11 de junio. Después de ese tramo bateó .253 con cuatro cuadrangulares, OPS de .686 y 14 estafadas en 21 salidas, a la vez que disputó 60 de 79 partidos de los Bravos del 12 de junio al 28 de agosto.
Acuña Jr. ha dicho que la rodilla le molesta más a la hora de correr que en el momento de batear. Pero no se asemeja al mismo jugador que ha pasado los últimos años en tratar de romper algún récord de Statcast a diario. La velocidad de salida de sus batazos ha mermado de 93.8 millas por hora en el 2021 a 91.1 mph este año. Incluso apenas el 12.8 % de sus visitas al plato han resultado en barriles, comparado con el 20.3 % en el 2021. Su índice de conexiones fuertes también ha disminuido del 54.8 % al 50.6 %.
OCTUBRE ES CLAVE
Quizás tener por lo menos un día de descanso por la semana en lo que resta de la campaña regular le permitirá ser el mismo de siempre. Dejarlo jugar al mismo ritmo con la esperanza que mejoraría no ha funcionado. Los Bravos simplemente tienen que cruzar los dedos y esperar que un poco más de reposo en septiembre le sirva para estar al máximo en octubre o en el mes clave encaminado a la Serie Mundial.
Mark Bowman/MLB.com
