El argentino Manu Ginóbili de 45 años al Salón de la Fama del baloncesto de la NBA en Springfield de Massachusetts en Estados Unidos el pasado sábado 3 de septiembre.
De inmediato advirtió que no será el último nombre en esa lista. También tendrán su momento El francés Parker, el alemán Dirk Nowitzki y el español Pau Gasol.
La maniobra, una finta en la que daba un paso en una dirección y de inmediato se cambiaba a la otra para sacarse la marca del defensor y penetrar hacia el aro, fue el sello de presentación del suramericano. La dominó de tal manera que fue calcada por muchos en la NBA.
Y puede decirse que esa jugada le abrió el paso al Lugar Inmortal. El cuatro veces campeón de la NBA con los Spurs de San Antonio y campeón olímpico fue la figura sobresaliente en la ceremonia de exaltación,
Ginóbili disputó sus 16 temporadas en la NBA con San Antonio, hizo sociedad con Tim Duncan y Tony Parker, uno de los mejores tridentes vistos en la Liga.
“Es algo que nunca te ibas a imaginar», dijo Ginóbili sobre su incorporación al Salón de la Fama. “Empiezas a jugar porque te gusta, es divertido, estás con tus amigos. Y ahora, cuando pensaba que no iba a recibir más sorpresas con el final de mi carrera, recibo un reconocimiento como este. Te hace evocar un poco el pasado, tu historia y resulta ser increíble”.
Ginóbili no es el primer jugador internacional de la NBA exaltado en Springfield. Pero es el primero seleccionado por el comité de Norteamérica, o sea ha sido elevado esencialmente por los méritos de su trayectoria en la NBA y no por lo hecho internacionalmente.
AP
Manu Ginóbili una gran figura de Argentina