Apenas llevamos cuatro días de 2023 y, sin embargo, más de 400 personas ya han perdido la vida a causa de las armas de fuego en Estados Unidos.
El tema de la posesión de armas y la violencia armada ha sido debatido durante mucho tiempo en el país, con muchos argumentando que es su derecho constitucional poseer un arma, mientras que otros citan los cientos de tiroteos masivos cada año como evidencia de por qué las armas de fuego deben ser prohibidas o reguladas más estrictamente.
Solo en 2022 se registraron en Estados Unidos 647 tiroteos masivos, incidentes en los que se dispara a un mínimo de cuatro víctimas, ya resulten heridas o muertas.
Eso supone más de uno al día, con más de cuatro personas heridas o muertas por disparos cada 24 horas.
Y no parece que esas cifras vayan a mejorar en el nuevo año, ya que el Gun Violence Archive afirma que ya se han registrado y verificado siete tiroteos masivos en los cuatro días transcurridos desde que comenzó 2023.
Cinco de esos tiroteos masivos tuvieron lugar el 1 de enero, cuando un total de 20 personas resultaron heridas y cuatro murieron en tiroteos en Illinois, Carolina del Norte, Ohio, Pensilvania y Florida.
Las cifras son aún más impactantes en cuanto al número total de heridos y muertos por armas de fuego.
Desde que comenzó 2023, 362 personas -casi una por cada día que nos queda de año- han resultado heridas por armas de fuego, ya sea de forma intencionada o no.
En cuanto a las muertes, hasta ahora se ha informado de un total de 426 fallecidos. Según el Gun Violence Archive, 162 de esas muertes son consecuencia de homicidios, asesinatos, uso defensivo de armas o disparos intencionados.
Otras 264 personas han muerto por suicidio.
Entre los fallecidos en lo que va de año hay tres niños de 0 a 11 años y 14 adolescentes de 12 a 17 años.
La semana pasada, Jack McDevitt, profesor de la Escuela de Criminología y Justicia Penal de la Universidad Northeastern de Boston (Massachusetts), declaró a la VOA que en Estados Unidos se está produciendo «un retorno a tasas de violencia armada mucho más elevadas de las que hemos visto en mucho tiempo».
«Estamos empezando a ver cómo más gente utiliza armas de fuego para ir a por víctimas a las que perciben como diferentes».
Los comentarios de McDevitt se produjeron después de que un hombre sospechoso de abrir fuego en un supermercado de Buffalo (Nueva York) en octubre de 2022 dijera que su objetivo era la comunidad negra.
Al mes siguiente, cinco personas murieron y 17 resultaron heridas tras un tiroteo en un club gay de Colorado Springs.
El número de tiroteos masivos en 2022 duplicó con creces el total de 2014, cuando se registraron 269 tiroteos masivos.
ENLACE ORIGINAL: More than 400 people have already lost their lives to guns in the US this year (unilad.com)