Coral Gables, Florida (VIP-WIRE).

Mi admirado Aaron: Te has convertido, con razón y poder al bate, en una de las figuras más notables del ambiente del béisbol. Nada fácil hoy, cuando bigleagues de la calidad de Shohei Ohtani, Julio Urías, Pete Alonso, Paul Goldschmidt, Freddie Freeman and company.

Por eso, porque eres de los más admirados, ya dicen los del diario chisme, que te vas de los Yankees, y nada menos, que para los Medias Rojas. También leí que sí, que te gustaría irte a Boston, pero no lo creo, porque no encuentro el por qué, aún cuando en febrero puedes convertirte en agente libre.

Pero óyeme, ¿Dónde te van a tratar mejor y a querer más que en Yankee Stadium?.

Los Yankees te pagan este año 19 millones de dólares y en tus siete campañas, incluso la actual, has recibido 39 millones 526 mil dólares.

Además, a tus 31 años, que vas a cumplir el 26 de abril, podrías tener con los Yankees un contrato para 10 temporadas por unos 300 millones más. Nada despreciable, y además con “la ciudad que nunca duerme a tus espaldas”.

Sí, estás en lo más alto, mi querido AA, pero ten en cuenta que eso desaparece cuando uno menos lo piensa. Yo tuve que retirarme a los 36 años, por supuesto, sufría de osteomelitis y había soportado muchas lesiones. Pero a todos los peloteros nos toca irnos del béisbol alguna vez.

Juegas con el equipo de béisbol más famoso del mundo. Y no es cosa nueva. Considero que desde 1923, cuando inauguraron el primer Yankee Stadium, los Yankees se convirtieron en el símbolo del béisbol que han sido durante estos 99 años.

Con 27 Series Mundiales ganadas, se ha escrito una historia en El Bronx y para el mundo, que permanecerá por Siglos. Y ser tú parte trascendente de esa trayectoria, con tus jonrones y tu contrato multimillonario, sería algo que nada podría igualar en esta vida, ni parte de la otra.

Cuando te hablo de “la otra vida”, es porque estoy aquí, la conozco y estoy seguro de que nada intervendrá contra los Yankees y su gloria.

Mi sugerencia amistosa es que te conviertas en el consejero de los jóvenes bateadores que lleguen a los Yankees. Ellos y el club lo necesitan. Tus palabras van oírse sabias por los muchachos y seguramente, lo serán, porque sabes mucho de bateo, lo demuestras al sacar los batazos como lo has hecho en estos últimos años.  

Te deseo lo mejor de lo mejor en este final de la temporada y siempre. Un abrazo del tamaño de Yankee Stadium… Mick.      

Gracias a la vida que me ha dado tanto, incluso un lector como tú.

ATENCIÓN. Lee el archivo reciente de “Juan Vené en la Pelota” en internet, por “el deporte vuelve a unirnos”. 

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@juanvene5

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