Cientos de exjugadores de raza negra retirados de la NFL o fútbol americano tendrán derecho a recibir pagos de indemnizaciones.
A muchos le negaron recibir un pago como parte del acuerdo de conmoción de 1.000 millones de dólares, incluso volvieron a realizar las pruebas para eliminar el sesgo racial. Los nuevos resultados añadirá millones de dólares al reparto total de la NFL.
Los cambios del año pasado al acuerdo buscaban eliminar la raza de los exámenes. El uso de la “normatividad racial” en las pruebas de demencia dificultó que los jugadores afroestadounidenses aprobaran el deterioro cognitivo, para calificar a la indemnización a jugadores retirados que promedia 500 mil dólares.
Cerca de 650 personas han recibido una nueva calificación en sus pruebas de demencia, según el reporte que dio a conocer el viernes 12 de agosto la firma de abogados que presentó el caso contra la NFL. Los jugadores en retiro cumplían el resto de los requisitos para recibir la indemnización, que incluyó horas de pruebas de validación que comprobó que sus vidas estaban afectadas y que no fingían.
Del total 51 califican ahora para una indemnización moderada o avanzada, que varía por su condición y años en la Liga. Cerca de 250 tienen signos de demencia y recibirán una compensación hasta de 35.000 en tratamiento y mejores pruebas médicas. Inicialmente ninguno calificó para recibir una indemnización debido a la normatividad racial de las pruebas.
El total reclamado aprobado acaba de superar los 1.000 millones de dólares. Pero debido a las apelaciones y auditorías, el pago está por debajo, y de momento se encuentra en 916 millones de dólares. Esto incluye los cuatro diagnósticos con derecho a compensación: Alzheimer, Parkinson, Lou Gehrig y muertes, que ocurrieron antes de abril del 2015 y que tenían encefalopatía traumática crónica.
AP
Ken Jenkins y Clarence Vaughn III, exjugadores de fútbol americano, con sus esposas esperan indemnizaciones
