La tragedia azotó este lunes 7 de octubre a la comunidad del sector Cardonal Sur, en el suroeste de Maracaibo, cuando Andrea Virginia Caballero Valdés, una niña de sólo 11 años, mual estar allí,rió arrastrada por la fuerte corriente de agua de una cañada de la zona, en medio de las intensas lluvias que se viven en la ciudad capital zuliana.
Su madre, Jocelyn Valdés, yacía desconsolada en la sala de su casa junto al féretro, que tenía a un lado el cartel de cumpleaños, y es que, irónicamente, la niña celebró un año más de vida el pasado sábado 5 de octubre.
Alrededor de la pancarta, el féretro de Andrea estaba adornado con globos de color rosa y fucsia, los mismos con los que festejaron su cumpleaños hace solo cuatro días.
Según relata su tía, Griselis Perozo, alrededor de las 3:00 de la tarde de este lunes, la pequeña estaba en su casa junto a su hermano mayor, de 14 años, quien fue con un amigo a jugar en la cañada, y ella los siguió, a pesar de las advertencias de su hermano para que permaneciera en el hogar.
La desgracia
Aparentemente, al estar allí, a Andrea se le cayó en el cauce su gancho para el cabello, y, al querer recogerlo, la potente corriente de agua la arrastró.
Aunque otras versiones indican que fue una de sus cotizas el objeto que quería recuperar del agua.
Las personas que estaban en el lugar se percataron por los gritos de su hermano, y, rápidamente, lograron recogerla más adelante, tras lo cual la trasladaron a un Centro de Diagnóstico Integral (CDI) del barrio “José Gregorio Hernández”, a donde llegó sin signos vitales, por lo que, al mismo tiempo, contactaron a su madre.
La mamá, trabajadora del Metro de Maracaibo, sufre de complicaciones pulmonares que afectaron la economía del hogar, ya que el padre de la pequeña, Jorge Caballero, actualmente no vive con ellas, y se encuentra en Colombia
Este martes, se realizaron los actos velatorios de Andrea en su casa, bajo un ambiente de profunda tristeza, desolación y muchas lágrimas, ante tal repentina y dolorosa pérdida.
Solidaridad
Los compañeros trabajadores de Jocelyn desbordaron la casa con muestras de cariño y solidaridad.
“Era una niña muy extrovertida, era muy cariñosa. Ella te veía y decía tía pa’ allá, tía pa’ acá”, comentó Griselis.
Andrea cursaba el tercer grado de educación primaria en el colegio Cardonal Sur, que se ubica a pocas cuadras del lugar de su trágico fallecimiento.
La familia organiza en estos momentos su entierro, mientras esperan que su padre regrese de Colombia para terminar de concretar los trámites, ya que, por los gastos de su enfermedad, la madre no pudo costear algunas de las cuotas del servicio funerario que tenía apartado.
Fuente: Versión Final
Gráfica: Referencial
RG