“En las largas y difíciles luchas sindicales de toda la historia del país, Acción Democrática (AD) ha sido el campeón en la defensa de los derechos y de las reivindicaciones de los trabajadores venezolanos”.
Quien así se expresó fue el secretario sindical seccional de AD (Ramos Allub) en el Estado Lara, Porfirio Carpio, al hacer uso de la palabra durante el denominado “Gran Acto Sindical” efectuado durante el recién concluido fin de semana en “La Pochocha”, la casa central de la tolda blanca en esta entidad federal.
En este acto, el discurso de orden corrió cargo de la profesora Blanca Terán de Arrieta, quien es, además, presidenta de la Asociación de Profesores de la Universidad Pedagógica Experimental Libertador, Núcleo Barquisimeto.
Confianza
Durante su exposición, Carpio recordó cómo AD se constituyó, desde mediados del siglo pasado, en depositario de la confianza de las grandes masas de trabajadores organizados del país,
Agregó que, incluso, llegó a controlar durante muchos años la gran mayoría de las organizaciones sindicales del país, tanto a nivel público como a nivel privado, al igual que la Confederación de Trabajadores de Venezuela (CTV).
–Pero eso –destacó— no fue obra de la casualidad, sino fue obra de que los trabajadores venezolanos, la clase obrera venezolana, vio y palpó en nuestro partido a los grandes y abnegados dirigentes sindicales que luchaban a brazo partido por el bienestar de ellos.
–Y fueron nuestros dirigentes sindicales los que lograron las más grandes conquistas socio-económicas conquistadas por los trabajadores venezolanos en toda la historia republicana, incluso hasta la actualidad.
–Una actualidad que pretende ahora ser desconocida y destruida por este gobierno seudorrevolucionario, hambreador, arbitrario y demagogo, que ha arremetido contra la clase obrera, contra los sindicatos y contra los dirigentes sindicales, muchos de los cuales, por cierto, purgan prisión, o son objeto de persecución y de amedrentamiento por el sólo hecho de luchar y de reclamar las reivindicaciones de la clase trabajadora.
Reinaldo Gómez
