El clásico nacional disputado este miércoles 22 de agosto en el Estadio Polideportivo de Pueblo Nuevo, en San Cristóbal, la capital tachirense, terminó con uno de los finales más controversiales ocurridos en los últimos años del fútbol nacional.
Y, dependiendo del cristal con que se mire, ello pudiera originar una situación de escándalo en el fútbol profesional venezolano.
Resulta que el VAR anuló el gol de la victoria para el Caracas, ya sobre el final del partido, ante el Deportivo Táchira, lo que provocó la furia del equipo avileño.
Al minuto 90+8’, y con el marcador igualado a un gol por lado, Everardo Rose marcó lo que sería el gol ganador para el Caracas.
Sin embargo, los árbitros decidieron invalidar la anotación por un presunto fuera de lugar, pero, luego, al observarse las líneas trazadas desde el VAR, ello deja más dudas que certezas.
Es por ese motivo que, durante la celebración de la Copa Rey de Marcas, una competición de penales que se realiza tras el final de todos los encuentros de la Liga Futve, la plantilla de los “Demonios Rojos” decidió protestar ante la decisión arbitral.
Y vaya forma inesperada, pero impactante, de protestar.
Resulta que los tres pateadores del Caracas, Luis Casiani, Anderson Contreras y Néstor Jiménez, erraron a propósito sus lanzamientos, mientras que, consecuencialmente, su arquero, Frankarlos Benítez, no se movió en ninguno de los cobros del Táchira.
La insólita situación ya recorre el mundo del fútbol, y ha aparecido en varios medios internacionales, que no dan crédito ante la insólita situación.
Hasta los momentos, la Liga Futve no ha emitido ningún pronunciamiento oficial con respecto a la situación vivida este miércoles en San Cristóbal, por lo que se mantiene la expectativa en torno al rumbo que pueda tomar el caso.
Fuente: Versión Final
Gráfica: Referencial
RG
