El actor francés Alain Delon, icono del cine galo y figura fundamental en más de cinco décadas dentro de la escena cinematográfica, ha fallecido este domingo a los 88 años de edad en su residencia de Douchy, según han anunciado sus hijos Alain Fabien, Anouchka y Anthony en un comunicado.
En el mensaje, enviado a la agencia francesa AFP, los tres hijos explicaron que la muerte se produjo «serenamente» en la casa que Delon tenía en Douchy, en el centro de Francia.
En nombre de la familia, en el comunicado emitido han pedido que se respete «su intimidad en este momento de duelo extremadamente doloroso».
«(Sus hijos) Alain Fabien, Anouchka, Anthony y (su perro) Loubo están inmensamente tristes al anunciar el deceso de su padre. Falleció pacíficamente en su casa de Douchy, rodeado de sus tres hijos y su familia», según el comunicado familiar. El actor, especifican, falleció a primera hora de la madrugada».
Icono del cine francés
Alain Delon deja un legado de 122 películas, 88 de ellas como actor, dos como director y 32 como productor, en una carrera vinculada a directores trascendentales como Jean-Pierre Melville (‘El Círculo Rojo’, ‘El Silencio de un Hombre’), Luchino Visconti (‘Rocco y sus Hermanos’, ‘El Gatopardo’), René Clément (‘A Pleno Sol’) o Louis Malle, durante la que exprimió una esquiva figura de galán estoico y vulnerable.
En el apartado de galardones, desde su primera aparición en la gran pantalla en 1957, Delon ha sido acreedor de un César al Mejor Actor en 1985 por ‘Nuestra Historia’, de Bertrand Blier; el Oso de Honor en el festival de Berlín en 1995 y el premio del Festival Internacional de Cine de Berlín. En mayo de 2019 llegó su reconocimiento más destacado, con la recepción de la Palma de Oro de Honor en Cannes.
Como nota particular, destacan sus ocho colaboraciones con otro nombre inapelable como Jean-Paul Belmondo, fallecido en 2021. Precisamente el fracaso de la la última de ellas, Uno de Dos (Patrice Leconte, 1988), marcaría su paulatina retirada de la pantalla. Desde entonces, Delon se limitó a apariciones esporádicas como ‘Los Actores’ mientras abandonaba la estela pública.
Entre las primeras reacciones a su fallecimiento destaca la del ex ministro de Cultura francés y amigo del actor, Jack Lang, quien ha elogiado una figura «extremadamente modesta, reservada, sobria, tímida», que al mismo tiempo se expresaba de una manera «brutal, brillante».
«Alain ha conocido momentos felices y rechazos a lo largo de su vida», incluso en el mundo del cine, «que a veces le resultó duro», explicó Lang en su dedicatoria a un hombre con «convicciones» políticas muy alejadas del político socialista, que no impidieron una estrecha amistad.