Lo que una vez pareció que podría ser la respuesta de Netflix a Juego de Tronos parece que está en serios problemas. The Witcher ha perdido a Henry Cavill como su estrella después de la próxima temporada, y su primer intento de tratar de expandir su universo con un nuevo espectáculo de acción en vivo parece estar yendo desastrosamente.
Las buenas noticias primero: The Witcher: Blood Origin es actualmente la serie número 1 en Netflix, lo que indica que tiene una gran audiencia para impulsarla por encima de series como Wednesday y Emily in Paris.
La mala noticia: Lo que la gente está viendo puede hacerles desear no haberse molestado. En estos momentos, además de tener unas puntuaciones de crítica bastante bajas, The Witcher: Blood Origin tiene, literalmente, las peores puntuaciones de audiencia para un gran original de Netflix que he visto nunca.
Aunque un 35% de la crítica en Rotten Tomatoes no es muy bueno, supongo que técnicamente he visto cosas peores (mi estadística favorita de Netflix es el doble 0% de sus dos series de películas 365 días). ¿Pero para las puntuaciones del público? Nunca había visto un 9%.
La última vez que escribí sobre una serie con las puntuaciones de audiencia más bajas de todos los tiempos en Netflix, fue la ya cancelada serie Resident Evil, que tuvo un 22% de audiencia. Por aquel entonces, no había visto nada parecido, ni siquiera entre otras series criticadas. Incluso las series que todos consideraban bastante malas solían gustar más al público que a los críticos, como El legado de Júpiter, que obtuvo un 41% de la crítica y un 77% de la audiencia, o Haters Back Off, una serie que aparece en muchas listas de «las peores series de Netflix«, con un 50% de la crítica y un 76% de la audiencia. El único original que vi cercano a Resident Evil por aquel entonces fue Infinite Darkness, la serie de CG RE, que tuvo un 50% de puntuación de la crítica y un 39% de la audiencia.
The Witcher: Blood Origin puede ser la serie peor valorada, entre fans y crítica, que Netflix haya visto jamás. ¿Por qué? He aquí algunas muestras de ambos grupos:
«El equivalente televisivo, en cierto modo, de un hipervínculo tangencialmente relacionado que acabas pinchando mientras lees sobre otra cosa en Wikipedia». – Ready Steady Cut (Crítica)
«Deslucida, poco original y cargada de promesas de cosas mejores: The Witcher: Blood Origin es un asunto mediocre. Michelle Yeoh está desaprovechada, Lenny Henry carece de convicción y Minnie Driver hace una gran narración. Mejor evitarla». – We Got This Covered (Crítica)
«Mala, realmente mala. Me pregunto cuándo llegará Netflix al punto en el que no puedan tratar peor el material de origen. Ciertamente espero que este sea su punto más bajo finalmente, de lo contrario podría ser el momento de abandonar esta plataforma para siempre» = Al R (Crítica del Público)
«En un entorno de fantasía genérica con varios personajes de box ticking, un espectáculo sin alma se eleva desde un lugar que nunca debería haber subido. Entre abominable y atroz, este no-Witcher no tiene básicamente nada digno de mención. No hace absolutamente nada por un fan de Witcher: no añade nada, no construye nada, no tiene carácter ni parecido con el material fuente. Podría ver la serie original polaca que tal vez ni sepas que existe, pero esto fue demasiado». – Marcelo A (Crítica del público)
Simplemente brutal. No sé qué falló exactamente aquí, pero Netflix realmente necesita resolverlo para asegurarse de que lo que sea que envenenó esta serie no se traslade a las últimas temporadas de la propia The Witcher.
Actualización (27/12): Algunas personas se han preguntado por qué estamos teniendo esta conversación, dado que The Witcher está siendo «obviamente» bombardeada por las críticas para tener una puntuación de audiencia tan baja (ahora es del 8%, en el momento de esta actualización). Así que hay que tener en cuenta algunas cosas:
Sí, por desgracia es cierto que muchas series de fantasía que han contado con mujeres o personas de color en papeles destacados han recibido reacciones racistas. Y, sin embargo, ninguna de ellas ha sido «bombardeada por las críticas» tanto como lo que estamos viendo aquí con Blood Origin. Por ejemplo, House of the Dragon (82%), Rings of Power (38%) y el propio The Witcher (75%). Si queremos ir más allá de la fantasía e incluir otros títulos que sabemos que han sufrido un «bombardeo» activo, muchos de superhéroes, como Ms. Marvel (80%), Capitana Marvel (45%) y She-Hulk (33%), no se acercan ni de lejos al 8% de Blood Origin. Literalmente, nada lo está. Está en su propia liga.
En segundo lugar, puede que quieras… leer las críticas del público antes de decir que se trata de un rechazo específico al reparto diverso. Revisándolas, veo tal vez un comentario sobre «política» o «diversidad» por cada… ¿cincuenta críticas? La inmensa mayoría de ellas no se refieren a eso, ni mencionan la reciente salida de Henry Cavill de la serie, sino que se centran por completo en el extrañamente pobre valor de producción de la serie en comparación con la propia The Witcher, y en sus diálogos y actuaciones de madera.
Sin duda, The Witcher: Blood Origin no es literalmente la peor serie de la historia de Netflix, como sugieren estas puntuaciones. Pero para tener puntuaciones tan bajas, combinadas con las bajas puntuaciones de los críticos, algo ha ido muy mal aquí, y es un gran problema teniendo en cuenta que The Witcher se suponía que era una gran IP y un mundo para Netflix para crecer y expandirse en el futuro. Y parece que ahora todo se está desmoronando.
ENLACE ORIGINAL: https://www.forbes.com/sites/paultassi/2022/12/27/the-witcher-blood-origin-has-netflixs-worst-audience-scores-of-all-time/?sh=706b961d127a
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