84 años del Natalicio de Felipe Pirela
Un día en que me conducía hacia el este de Barquisimeto con un hermano de mi madre, mi tío Ely Miguel Piña de grata recordación, éste me comentó al pasar frente a la sede del Rectorado de la Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado, en la carrera 19 con entre calle 8 y 9, que ahí se había efectuado el baile amenizado con la Orquesta Billo´s Caracas Boys, en que actuó por última vez con esta agrupación Felipe Pirela, pues al poco tiempo el sello disquero Velvet, se lo arrebató al Billo Frómeta, ya que la empresa discográfica le ofreció un contrato que le aseguraba grabar dos discos al año, regalías y road manager en las giras internacionales.
Indiscutiblemente son muchos los temas popularizados por la voz inconfundible de Felipe Antonio Pirela Morón, pero en lo personal siempre lo he recordado y lo sigo disfrutando con su magnífica interpretación de “Puerto Cabello” de Italo Pizzolante con el respaldo de la Orquesta más “Popular de Venezuela” y el colosal arreglos que le hizo el maestro Luis María “Billo” Frómeta, quien lo catapultó al estrellato haciendo brillar con luz propia con las orquestaciones que realizó para el timbre de voz inconfundible.
Y es que, “Puerto cabello” forma parte del Long Play “Paula” con el cual tuvo lugar el relanzamiento de Billo en Venezuela, porque había sido sancionado en 1957 por la Asociación Musical del Distrito Federal de Caracas, que le impuso un veto sindical, debido a la contratación que había hecho del saxofonista dominicano Sócrates De León, sin consultar previamente a la asociación, que en esos momentos estaba dirigida por sus competidores, como lo comenta Román Martínez Galindo, en el documental de Bolívar Films “A Gozar con Billo” de 1986 dirigido por Fernando Venturini.
Hacemos alusión a este episodio de la vida de Luis María “Billo” Frómeta Pereira, porque cuando este fabuloso músico volvió a la escena fue con todos los hierros, reorganizando su orquesta, adaptado al nuevo tiempo que imponía 1960, año en que el empresario Manuel Caballero Gramcko, estaba recién llegado al país, luego de realizar estudios en Europa con la visión de montar una empresa que fuese asesora de los centros disqueros más importantes de Venezuela y países cercanos, además de la fundación de una nueva marca “Discos Gramcko”, cuyo nacimiento había acecido en 1957 a través de la publicación de su primer Long Play, nada más y nada menos que “Melodías Larenses” con el maestro Antonio Carrillo, el primero y único disco de Carrillo grado por él directamente en un estudio de grabación en Caracas.
Pues bien, Billo y Manuel Caballero Gramcko entraron en sociedad y con un crédito personal de 25.000,oo bolívares, cubrieron los costos de contratación de los músicos y sesiones de grabación, donde el acuerdo también incluía la exclusividad de ese primer LP de Billo. Es así como el primero de noviembre de 1960, se bautiza en el programa televisivo “Esta Noche Billo” el LP “Paula” donde debuta con la nueva Orquesta Billo´s Caracas Boys, Felipe Pirela, a la postre llamado «El Bolerista de América».
Felipe Antonio Pirela Morón, nació en Maracaibo, estado Zulia, el un 4 de septiembre de 1941, fue el octavo de los hijos del matrimonio conformado por Felipe Antonio Pirela Monsalve quien era albañil y Lucía Morón González de Pirela, quien era ama de casa y comerciante, además de aficionada a las expresiones artísticas. Desde niño, el pequeño Felipe Antonio futuro vocalista mostraba interés en el canto, siendo apoyado por su madre tanto en el aprendizaje musical, como en sus primeras actuaciones en radio local en un programa de aficionados, luego de adolescente cantó en bares y pequeños clubes con un grupo formado por un acordeonista llamado Luis Ávila. De hecho, a los 13 años de edad, junto a dos de sus hermanos y vecinos del barrio maracaibero El Empedrao, integra la agrupación Los Happy Boys que tocaba en diversos locales de Maracaibo boleros, puestos de moda por figuras tales como Alfredo Sadel, Olga Guillot y el chileno Lucho Gatica.
Según Luis Armando Ugueto (2019): “…En los primeros meses de 1958 tuvo su primer encuentro con la notoriedad al ganar un concurso en la recién inaugurada televisora regional Ondas del Lago, Canal 13. El espacio se llamaba La Puerta de la Fama, e interpretó el bolero Mi complejo, del director de la orquesta de planta de la estación, Juanito Arteta (trompetista, director de orquesta y compositor español), quien se convirtió en su maestro hasta que decidió viajar a Caracas a probar suerte…”
Prosigue Ugueto en su relato: “…Entre junio y noviembre de 1959, estuvo en Caracas intentando abrirse camino en el competitivo medio artístico de la ciudad. Participó en algunos programas en Radio Caracas Radio con el conjunto Los Modernos de la cantante Lennys del Rio. También se presentó en el Coney Island y en el local nocturno de El Indio Araucano, aunque este nunca le pago sus actuaciones…”
Desanimado Felipe Pirela piensa regresar a Maracaibo a trabajar de nuevo en el Canal 13 y quiso la suerte, el destino o su fe, como lo comenta Luis Armando Ugueto, que el dueño de la orquesta Los Peniques, Jorge Bertrán, presenciara su actuación en la televisión el 18 de noviembre, quien lo contrata y con la cual se inicia como profesional. Con Los Peniques grabó en 1960 sus dos primeros boleros, Entre copa y copa y No sufras corazón, de Carlos Guerra en el único álbum de esta agrupación, titulado “Carnaval con Los Peniques”. Sin embargo, su tránsito por esta orquesta no tuvo mayor relevancia, no pasaría nada, Beltrán no era músico ni productor, si no empresario y no supo sacar provecho del talento de Pirela.
Recordemos, que Luis María “Billo” Frómeta había llegado de República Dominicana a Venezuela para amenizar un baile a efectuarse el 31 de diciembre de 1937 y desde entonces se dedicó al ejercicio profesional como músico, compositor, director y arreglista, desarrollando una admirable capacidad como empresario artístico y productor musical. Por ello siempre estuvo a la saga de nuevos y buenos talentos. La circunstancia de la sanción que le impidió actuar en nuestro país, propicio que el joven publicista Renato Capriles que le admiraba en sumo grado, le propusiera hacer una orquesta y que fueran socios a partes iguales, naciendo así Los Melódicos en 1958. Paralelamente Billo grabó en el extranjero los discos que se vendieron en nuestro país en esa época, como se verifica en los testimonios del documental “A Gozar con Billo” (1986).
Finalmente, levantada la sanción Billo se prepara para reaparecer con todos los hierros, se monta en el programa de televisión “Esta Noche Billo” conducido por Paula Bellini junto a Delio Amado León y Henry Altuve, transmitido por Radio Caracas Televisión y de inmediato produce el Long Play “Paula” donde debuta Felipe Pirela y Cheo García, bajo el sello disquero Gramcko, donde además del tema ancla Paula, el joven cantante se luce con la interpretación del tema Puerto Cabello.
De acuerdo a Milagros Socorro (2021): “…Paula Bellini era la mujer más famosa de Venezuela. En la segunda mitad de la década de los 50 había visto crecer su celebridad como modelo, animadora e incluso, cantante, pero en 1960, como colofón de una trayectoria fulgurante y expresión del reclamo erótico que ejercía, Billo Frómeta compuso el danzonete “Paula”, que aludía a la atractiva imagen televisiva de Bellini y, por si fuera poco, usó un close up de su rostro como imagen de la carátula. En esa fotografía a color, Paula Bellini aparece con la cabeza un poco inclinada hacia atrás, con la lánguida mirada hacia el espectador y los húmedos labios entrabiertos como en espera de un beso voraz…”
En el proceso de reunir el personal para su relanzamiento, muchas fueron las voces que le recomendaron a Felipe Pirela como bolerista a Billo, quien por muchas vías recia tales recomendaciones, le ubicó y habló con Edgar Pirela, hermano de Felipe que fungía de su representante artístico, le probó y le firmó el 14 de junio de 1960.
Señala Ugueto (2019) que: “…el premio sería tan grande como el esfuerzo; entre junio y diciembre de 1960 se convirtió en el cantante joven más importante del país. Fue un fenómeno que Billo no pudo prever. Cada disco grabado era un suceso, la agenda de bailes superaba las veinte fechas mensuales. En tres años Felipe contabilizó mil presentaciones fuera del trabajo en radio y televisión. No había descanso y pronto se trazó una nueva meta: ser solista…”
La renuncia de Pirela a la orquesta se produjo después de diferencias con Billo Frómeta, pues el músico no se había enterado de que el cantante había recibido propuesta de la compañía discográfica Velvet de Venezuela para grabar un LP y hacer presentaciones en México. Pirela hacía frecuentes consultas sobre este asunto a sus compañeros de orquesta, pero nada dijo a Frómeta, lo que supuso el disgusto de su parte. Esta renuncia se concreta en septiembre de 1963, iniciándose así como solista. Pirela tenía entonces 22 años y necesitaba tener libertad y capitalizar su creciente popularidad Sin embargo, años después Pirela, siendo ya un intérprete cotizado, fue contratado para cantar al lado de la orquesta Billo’s Caracas Boys, en febrero de 1971.
El empresario José Pagé, dueño de la casa discográfica Velvet, firmó a Felipe Pirela y de inmediato viajó a México a grabar con Chucho Rodríguez y un equipo de arreglistas que serían los responsables de su nuevo sonido. El disco, Un solo camino: México, se agotó en las primeras semanas, la compañía no tenía la capacidad para enfrentar los pedidos. Con éste su primer álbum es bautizado con el seudónimo que lo inmortalizaría: El Bolerista de América.
Luis Armando Ugueto en su trabajo “Felipe Pirela en Retrospectiva” cuenta que en los primeros días de enero de 1964 el canatante salió de gira a Colombia por cuatro semanas. Su exitoso debut fue en Caracol Radio. Luego la suerte lo acompañó a los principales clubes y teatros de Bogotá, Medellín, Barranquilla y Cali. La aceptación del público hizo que la gira se prorrogara seis meses. En esos días adquirió el dominio y la seguridad que necesitaba para enfrentarse al público sin el respaldo de la Billo’s. Su timidez tuvo que ceder ante la necesidad de valerse por sí mismo en espectáculos multitudinarios, compartiendo escena con los intérpretes más importantes de su tiempo.
En muy poco tiempo, Pirela se convirtió en el fenómeno musical del momento, de allí que era reclamado en los mejores escenarios de América. Comenzó sus giras a los Estados Unidos, Colombia, República Dominicana, Puerto Rico, Ecuador, Perú. En todos estos escenarios los triunfos fueron apoteósicos, la fama le llovió entonces y su estatura como cantante se dejó sentir. Los premios tampoco se hicieron esperar: Ganó, entre ellos el Disco de Oro que le fuera otorgado por Velvet, por haber vendido más de un millón de discos, récord sin precedentes para un cantante venezolano.
El 18 de julio de 1964, conoce en una fiesta de Mariela Montiel Prieto, una adolescente de 13 años de edad. Enseguida le propuso matrimonio, contrayendo matrimonio civil el 11 de septiembre y el eclesiástico el 18 de septiembre en Caracas. La luna de miel transcurrió en San Juan de Puerto Rico y Miami.
Como artista en vertiginoso ascenso, su convivencia marital era frecuentemente interrumpida por los compromisos artísticos. La pareja concibe a su única hija Lennys Beatriz Pirela Montiel. Sin embargo, en 1966 debido a un incidente doméstico y a la inmadurez de su esposa, el artista se divorcia bajo condiciones desventajosas impuestas por la familia de ella, hecho que marcaría a Felipe Pirela para siempre. Entonces, Mariela Montiel divulgó declaraciones en diversos medios impresos que desprestigiaban al cantante y ponían en duda su conducta sexual. Con base a esta experiencia desafortunada, Pirela, compone su primer tema titulado Injusto Despecho incluido en su álbum homónimo de ese mismo año.
En estas condiciones, Pirela buscó alejarse del escándalo marchando inicialmente a Colombia, luego a República Dominicana y finalmente, a Puerto Rico, donde decide radicarse. Esto no impediría que el cantante volviera eventualmente al país a cumplir diversos compromisos.
En 1967 cumplió compromisos en Venezuela, México, Estados Unidos y Canadá (en la ciudad de Montreal). En México, durante una gira, realizó su primer y único disco con guitarras titulado Boleros Con Guitarras en el cual fue acompañado por el guitarrista Benjamín Correa y los restantes integrantes del trío Los Tres Caballeros y en diciembre de ese año, representa a Venezuela, junto a la cantante y actriz Lila Morillo en el Segundo Festival Latinoamericano de la Canción Popular, realizado en Miami, donde obtuvo el séptimo lugar.
Su segunda y última participación en festivales de canto en Venezuela se dio en 1969, en la primera edición del Festival de la Voz de Oro de Barquisimeto, creado por el periodista José “Cheche” Cordero Valenzuela, realizado en el anfiteatro del Complejo Ferial de la capital larense. Decidió entonces residenciarse en Estados Unidos y por ello liquidó sus compromisos discográficos en nuestra nación. Tenía entonces, la intención de crear su propia empresa discográfica, pero este proyecto nunca fue llevado a la práctica.
En los meses que precedieron su muerte, estaba trabajando en un nuevo proyecto discográfico con un formato orquestal diferente al acostumbrado. Velvet escogió a Javier Vásquez, Ray Santos y Jorge Millet como arreglistas de la sesión de grabación que se llevaría a cabo el 15 de junio de 1972. La producción y el repertorio estuvieron muy bien cuidados; querían relanzar la carrera de Pirela y darle un aire cercano al nuevo movimiento de música latina liderado por Fania.
Serían las 9:00 am del domingo 2 de julio de 1972, cuando Pirela se desplazaba por la zona hotelera de Isla Verde, frente al Hotel Cecilia’s Place, calle La Rosa, a 4 metros de la entrada de ese hotel y a unos 10 kilómetros de San Juan, cuando desde un automóvil en marcha le efectuaron varios disparos de arma de fuego, recibiendo varios impactos en el cuerpo, que lo desplomaron mortalmente al pavimento. Fue auxiliado y trasladado al Hospital Presbiteriano de Santurce, donde ingresó sin signos vitales debido a que uno de los proyectiles le había perforado la arteria aorta. Al momento de su fallecimiento, Pirela contaba en con 31 años de edad.
Pirela tenía grandes expectativas con el proyecto discográfico en ciernes, se había superado respecto al anterior, y las canciones y la orquestación le permitían un mayor lirismo, según Luis Armando Ugueto. Había una gira prevista por Nueva York y Dominicana. Era cuestión de días para iniciar una nueva etapa en su carrera, pero los fantasmas de su vida fuera del escenario no lo dejarían cumplir sus sueños, pues esa mañana del domingo 2 de julio encontró la muerte a manos de un convicto apodado Luis Portabales.
Barquisimeto, domingo 7 de septiembre de 2025.
Fuentes Consultadas:
Fundación Wikimedia (2025) Felipe Pirela [Información en Línea] Disponible en: https://es.wikipedia.org/wiki/Felipe_Pirela
Martínez, R. (2002) ¡Epa Isidoro! Confidencias coincidentes de Billos. Editorial Melvin. Caracas. Venezuela.
Pacanins, F. (2011) Luis María “Billo” Frómeta. Biblioteca Biográfica Venezolana. El Nacional. Volumen 126. Editorial Arte. Caracas. Venezuela.
Socorro, M. (2021) Paula Bellini recibe el año 1961. [Artículo en Línea] Disponible en: https://prodavinci.com/paula-bellini-recibe-el-ano-1961/
Ugueto, L. (2019) Felipe Pirela en Retrospectiva. [Artículo en Línea] Disponible en: https://gladyspalmera.com/coleccion/el-diario-de-gladys/felipe-pirela-en-retrospectiva/
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