En Barquisimeto, un inquieto comunicador social popular, como se define a sí mismo, sobre la base de su experiencia y su creatividad, ha tenido la idea de conformar un gigantesco y ambicioso plan al que llama Macroproyecto de Factibilidad Parque Temático La Ruezga, para construir en la capital del estado Lara.
Él es Douglas Canelón, quien a lo largo de su vida se ha desenvuelto en la actividad privada, pero también ha laborado en la administración pública.
Cuenta que trabajó durante varios años en la Dirección de Desarrollo Social del Ejecutivo regional, cuando era titular de ese despacho el profesor Lenín Romero, en la administración de Orlando Fernández Medina.
Gracias a una serie de proyectos y de propuestas de las que tuvo conocimiento durante ese lapso, todo ello aunado a la experiencia que ya para ese momento acumulaba, le vino a su mente la idea antes indicada, la cual está consciente de que requiere de una inversión milmillonaria.
Pero piensa que, mediante una llamativa promoción, y gracias a la buena relación del gobierno nacional especialmente con algunos `países árabes, ello pudiera llamar la atención de inversionistas de esos países, especialmente de aquellos que se desenvuelven en el aspecto turístico.
El proyecto
El proyecto pasa por el embaulamiento de la quebrada La Ruezga, algo de lo se ha hablado mucho desde hace ya algunos años.
Tendría una extensión de 25 kilómetros de longitud, por 110 metros de anchura, en cuyo trayecto se construirán 25 bulevares.
Inicialmente, se construirá una primera etapa de 10 kilómetros, que irán desde donde culmina la quebrada Mosquera y comienza la misma quebrada La Ruezga, hasta la avenida Las Industrias, al lado de la empresa EPA.
Este tramo contaría con 11 bulevares con sus respectivas pasarelas de rampas zigzag, tipo ornamental.
La segunda etapa se extendería luego por las parroquias Unión, Catedral y Santa Rosa, con sus respectivos bulevares.
Cada bulevar contaría con comedores gratuitos para personas en situación de vulnerabilidad, debidamente evaluadas por calificados nutricionistas; con institutos preescolares no convencionales, y se ofrecerían allí actividades educativas.
Lo educativo sería un eje fundamental del proyecto, porque contempla desde talleres de artes y oficios como cerámica, tejidos, orfebrería, tallado de madera y piedra, y panadería artesanal; hasta talleres de ordeño de ganado vacuno, caprino y ovino.
El parque sería sede de cuatro radioemisoras comunitarias, una por cada una de las parroquias sobre la cual se asienta.
Tendrá igualmente la obra en su vialidad –pavimentada, por supuesto– un estacionamiento para 50 vehículos, y cinco canales de circulación, que podrían ser utilizados para: paseos a caballo, recorridos en carretas de paseo con ruedas de goma, y también recorridos en “trencito” con ruedas igualmente de goma.
Estima que la construcción del parque tal vez alcance unos cinco años y ya está organizando un movimiento para recolectar firmas de apoyo al proyecto y entregarlas al presidente Nicolás Maduro.
Reinaldo Gómez
Fotos: Cortesía
