En un anuncio que seguramente polarizará la escena política israelí, el primer ministro Benjamin Netanyahu ha confirmado este sábado su intención de presentarse a las próximas elecciones generales, previstas para noviembre de 2026. Interrogado por la televisión israelí Channel 14, Netanyahu contestó con un rotundo «sí» tanto a su candidatura como a su expectativa de ganar la contienda, a pesar del alto nivel de descontento público y las protestas recientes.
El anuncio se produce en un momento de gran sensibilidad nacional debido a la guerra en la Franja de Gaza. En la misma entrevista, el primer ministro abordó el fin del conflicto, asegurando que la guerra «terminará cuando se apliquen los términos del acuerdo que hemos aceptado.»
Netanyahu subrayó que la prioridad inmediata es la Fase Uno de dicho acuerdo, que implica la vuelta de «todos nuestros rehenes,» un tema que sigue siendo la máxima prioridad y dolor para la sociedad israelí. «Estamos trabajando en ello ahora mismo,» puntualizó, insistiendo en que se ceñirán «firmemente a la aplicación del acuerdo, en su totalidad.»
Finalmente, el primer ministro advirtió sobre la postura inflexible ante Hamás. Aseguró que si el grupo no accede a desarmarse, se hará «por las malas.» Según Netanyahu, la guerra solo terminará después de que Hamás se desarme y Gaza sea desmilitarizada por completo. Este posicionamiento es clave en su plataforma, mientras se prepara para lo que será una de las elecciones más disputadas de la historia reciente de Israel.