El presidente de Argentina, Javier Milei, fue evacuado de un mitin político en Lomas de Zamora, Buenos Aires, luego de que su caravana fuera atacada con piedras y otros objetos. El incidente, que interrumpió abruptamente el evento, ha generado una fuerte condena por parte del gobierno y se atribuye a «intrados infiltrados» en la militancia.

Según la prensa local, los atacantes se acercaron al vehículo en el que se trasladaba Milei junto a su hermana Karina Milei y otros miembros de su comitiva, y comenzaron a arrojar objetos. Ante la falta de seguridad, el mandatario y sus acompañantes tuvieron que ser evacuados de emergencia, y dos personas fueron detenidas por los hechos.

Tras el incidente, el presidente Milei utilizó sus redes sociales para pronunciarse sobre lo ocurrido. Acusó a los «kukás» (seguidores del kirchnerismo) de recurrir a la violencia al «carecer de ideas». El mandatario aprovechó para llamar a votar por su partido en las próximas elecciones de medio término, con la consigna «kirchnerismo nunca más».
El vocero presidencial, Manuel Adorni, también repudió el ataque, calificándolo como un acto de «militantes de la vieja política, kirchnerismo en estado puro». Adorni afirmó que «las piedras no son más que la muestra más fiel del final del kirchnerismo», reforzando el mensaje del gobierno de que la violencia es una táctica de la oposición.
