El presidente de Colombia, Gustavo Petro, generó controversia en la 80ª Asamblea General de la ONU al condenar la política militar de Estados Unidos en el Caribe. Petro afirmó que el despliegue de misiles en la región, bajo el pretexto de combatir el narcotráfico, es una «mentira» diseñada para dominar a los países de América Latina.
Durante su discurso, Petro aseguró que los misiles lanzados por Washington no están destinados a detener el flujo de drogas. «Dicen que los misiles en el Caribe eran para detener las drogas, ¡Mentira!», exclamó el mandatario, sugiriendo que la política exterior de EE. UU. está siendo influenciada por «colombianos que son aliados políticos de la mafia de la cocaína».
El presidente colombiano también denunció el asesinato de al menos 17 jóvenes en el Caribe por los misiles estadounidenses, a quienes describió como personas desarmadas y «pobres». Petro enfatizó que la política antidrogas de EE. UU. no busca detener la cocaína, sino dominar a los pueblos del sur. «Los misiles los tiran donde hay pobreza», sentenció.
Finalmente, Petro criticó el trato a los migrantes latinoamericanos, a quienes se les califica de criminales y son encerrados en «campos de concentración». El presidente afirmó que la migración es producto del bloqueo económico a países como Venezuela, Cuba e Irak, y que el bloqueo «no es más que un genocidio».
Por su parte, la delegación de EE.UU. se retira de la Asamblea General de Naciones Unidas pocos minutos después de que el presidente colombiano, Gustavo Petro inició su discurso y cuando se refería a la política contra las drogas del presidente Donald Trump. Vía @ztatianarh
