La Casa Blanca advirtió este jueves 28 de agosto, que la Administración de Donald Trump «está preparada para usar cualquier elemento del poder de Estados Unidos» para contener el tráfico de drogas desde Venezuela y llevar a sus responsables ante la justicia, sin descartar por tanto la vía militar.
La portavoz de la Presidencia estadounidense, Karoline Leavitt, evitó responder a una pregunta directa sobre un potencial ataque sobre objetivos en Venezuela –«no me adelantaré al presidente», indicó–, pero insistió en que Washington no se quedará de brazos cruzados.
«Una de las principales responsabilidades del presidente y de esta Administración es impedir el flujo ilegal de drogas a nuestro país y proteger a los ciudadanos de esos venenos mortales», añadió la portavoz durante una rueda de prensa.
Leavitt aseguró que varios países de América Latina y el Caribe han «aplaudido» el despliegue de buques militares en la región, recibido en cambio con recelo desde Caracas y sus gobiernos aliados.
El Gobierno de Nicolás Maduro acusó esta semana a Estados Unidos de preparar el despliegue de un submarino nuclear.
Europa Press