La Tradición del Día de los Difuntos
El Día de los Fieles Difuntos, de gran arraigo en la devoción de los venezolanos desde los más remotos tiempos, es un día festivo religioso dentro de las Iglesias católicas, en memoria de los fallecidos. Se conmemora el 2 de noviembre y su objetivo es orar por aquellos fieles que han acabado su vida terrenal y en el caso católico, por quienes se encuentran aún en estado de purificación en el Purgatorio.
Del libro Segundo de los Macabeos estudiosos sugieren que este se compuso en algún momento entre el 150 y el100 antes de Cristo, en él está escrito: «Mandó Juan Macabeo ofrecer sacrificios por los muertos, para que quedaran libres de sus pecados» (2 Mac. 12, 46). Análogamente, en los primeros días de la Cristiandad se escribían los nombres de los hermanos que habían partido en la díptica, que es un conjunto formado por dos tablas plegables, con forma de libro, en las que la Iglesia primitiva acostumbraba a anotar en dos listas pareadas los nombres de los vivos y los muertos por quienes se había de orar.
Para el siglo VI los benedictinos tenían la costumbre de orar por los difuntos al día siguiente de Pentecostés. En el siglo V había una celebración parecida el sábado anterior al sexagésimo día antes del Domingo de Pascua (domingo segundo de los tres que se contaban antes de la primera de Cuaresma) o antes de Pentecostés, lo que junto a la referencia del segundo libro de los Macabeos, marcan los orígenes de esta conmemoración dentro del imaginario popular de la feligresia.
Posteriormente en Alemania hacia el año 980, según el testimonio del cronista medieval Viduquindo de Corvey, hubo una ceremonia consagrada a la oración de los difuntos el día 1 de noviembre, fecha aceptada y bendecida por la Iglesia romana. Presumiblemente a causa de los movimientos milenaristas, que fueron movimientos religiosos o sociales que esperaban un gran cambio, a menudo cataclísmico, en un futuro cercano, seguido de un período de paz y abundancia, influyeron alrededor del año 1000, para que la conmemoración de los Fieles Difuntos, se realizase el día 2 de noviembre, fecha que se popularizó y extendió por la Cristiandad occidental, especialmente en el año 998, por idea de San Odilón de Cluny, hasta ser finalmente aceptada en el siglo XVI como fecha en el que la Iglesia celebraría esta fiesta. Aunque la iglesia siempre ha orado por los difuntos, fue a partir del 2 de noviembre del año 998 como lo hemos acotado unas líneas atrás, cuando se creó un día especial para ellos. Esto fue instituido por el monje benedictino San Odilón de Cluny. Su idea fue adoptada por Roma en el siglo XVI y de ahí se difundió al mundo entero.
Para la Iglesia católica, se trata de una conmemoración, como un recuerdo que la Iglesia hace en favor de todos los que han muerto en este mundo, que llamamos comúnmente como “los fieles difuntos”, pero aún no pueden gozar de la presencia de Dios, porque están purificando, en el purgatorio, los efectos que ocasionaron sus pecados.
El día de los fieles difuntos, que el populacho llama simple y llanamente Día de los Muertos, los creyentes ofrecen sus oraciones, llamadas sufragios, como simbólicos sacrificios y se efectúan oficios religiosos para que los fieles difuntos de la Iglesia purgante terminen con esta etapa y lleguen a la presencia de Dios. Se constituye así, una gran diferencia entre la fiesta del día primero y el ambiente de oración y sacrificio del día dos, ya que el primero es el Día de Todos los Santos y el dos el Día de Los Fieles Difuntos.
En Venezuela el día 2 de noviembre se conmemoran los Fieles Difuntos en las localidades del Municipio José Félix Ribas, en el Estado de Aragua, donde se hace una festividad de sincretismo religioso, heredada de los indígenas, llamada el Baile de llora, donde se aúnan practicas del catolicismo, con otras que tienen un candoroso sentido pagano y una ancestral reminiscencia bárbara. La realización de esta manifestación folclórica se efectúa el 2 de noviembre, como resultado del proceso de imposición de un calendario de festividades religiosas europeas por parte de los sacerdotes de épocas pretéritas.
El origen de este particular baile se vincula a las costumbres mortuorias de los aborígenes, debido a la similitud del hecho de escenificarse coreográficamente de manera circular, alrededor de una planta de cambur e incluir el típico grito guerrero de nuestra ancestral cultura originaria, para indicar el final de cada parte de la tradición. Esta manifestación ha sufrido muchas transformaciones durante el largo proceso de aculturación tanto musical como coreográfico a lo largo de su historia.
De tal forma que en nuestra nación, el Día de los Fieles Difuntos también se conmemora visitando los cementerios para adornar las tumbas con flores y velas, y para rezar por los seres queridos fallecidos. La tradición también incluye la realización de misas, el encendido de velas en los hogares y en algunas regiones como las que señalamos en el estado Aragua, se escenifican festivales de sincretismo religioso como el “Baile de la llora”.
En la visita a los cementerios, los deudos acuden a los camposantos para limpiar las tumbas, colocar ofrendas de flores, velas y fotografías, y compartir recuerdos, en medio de afectuosas y nostálgicas evocaciones. Es entonces cuando cobran fuerza telúrica, los rezos de oraciones por las almas de los difuntos y en los hogares igualmente el santo rosario se deja sentir ante el improvisado altar casero. Asimismo, la iglesia católica celebra misas en honor a los Fieles Difuntos en las capillas de los comentarios, como la antigua estructura religiosa de 1884 que corona la fachada principal del Cementerio Bella Vista, popularmente llamado “cementerio viejo”.
En los hogares, el cuarto de los santos, era igualmente de tradición, donde se encendían las velas para honrar a los fallecidos y guiar su camino hacia la luz, en medio de los Altares caseros.
El Día de los Fieles Difuntos, resulta ser propicio para una jornada de reflexión, homenaje y respeto para mantener viva la memoria de los seres queridos, así como refuerza los lazos intergeneracionales y la memoria colectiva, que se transmite de generación en generación, como también, constituye desde el punto de vista sociológico, una celebración de la vida y de herencia cultural, recordando que la muerte es parte del ciclo vital.
El Día de Difuntos es celebrado así por algunas iglesias cristianas como la Iglesias Cristianas Ortodoxas Occidentales, la Unión de Utrecht, la Comunidad de Provoo, la Comunión Anglicana y la Iglesia Católica, en memoria de los fallecidos. Esta celebración se sustenta en la doctrina que establece que al morir las almas de los fieles no han sido limpiadas de pecados veniales, o bien no han sido expiadas por trasgresiones del pasado. Debido a que dichas almas no pueden alcanzar la Visión Beatífica, se realizan rezos y el sacrificio de la misa.
Ahora bien, el abandono de los cementerios municipales de Barquisimeto, es realmente no solo lamentable, sino en algunos de ellos el panorama es realmente aterrador, como el caso del Comentario Bella Vista, en el ángulo noroeste de la Avenida Pedro León Torres con la Avenida Rómulo Gallegos, donde reina la inseguridad, la suciedad, la anarquía y el despojo impune de verdaderas joyas artísticas de la estatuaria funeraria allí existente.
El Cementerio de Santa Rosa en Colinas de Santa Rosa contiguo a la Iglesia La Consolación, no ha corrido mejor suerte, su deterioro se observa en menor grado, pero igual esta en lastimoso estado. Quizás, el menos derruido visiblemente es el Cementerio Monumental de Cerritos Blancos, el llamado Cementerio Nuevo en la Avenida Florencio Jiménez, sin embargo la profanación de las tumbas es evidente.
A pesar de los pesares, aún perviven los símbolos funerarios en su representación escultórica o material que en Barquisimeto se han utilizado en rituales, tumbas o lápidas para transmitir un mensaje espiritual, cultural o emocional. Pueden encontrarse en inscripciones, flores, figuras, colores o incluso en objetos depositados junto a los seres queridos, los más significativos mensajes de afecto, de reflexión, de amor y de reconocimiento póstumo, en una palabra, allí palpita la muestra antropológica más palpable de la historia de la ciudad, los aspectos más resaltantes de su sociología y la connotación socioeconómica y sociocultural de ayer y de hoy.
función principal de esta práctica cultural, es doble: por un lado, honrar la memoria de la persona fallecida; por otro, ofrecer consuelo a quienes atraviesan el duelo, recordando que la vida tiene un sentido que trasciende en el recuerdo imperecedero que en antaño se erigió en nuestros viejos camposantos y que hoy son parte esencial de nuestra identidad cultural.
Barquisimeto, domingo 2 de noviembre de 2025.
Fuentes Consultadas
Fundación Wikimedia (2025) Día de los Fieles Difuntos [Información en Línea] Disponible en:
https://es.wikipedia.org/wiki/D%C3%ADa_de_los_Fieles_Difuntos
López, P. (2024) Día de Difuntos [Artículo en Línea] disponible en: https://www.diainternacionalde.com/ficha/dia-difuntos
Macias, E. (1952) Postigo de Antaño y Hogaño. Crónica sobre la fundación y desarrollo de Barquisimeto. Capítulo inserto en la Guía Económica y Social del Estado Lara. Editada por Cámara de Comercio del Estado Lara con motivo del cuatricentenario de Barquisimeto. Editorial Continente. Barquisimeto. Venezuela.
Símbolos funerarios: significado según la cultura (2025) [Información en Línea] Disponible en: https://www.parc-roquesblanques.com/es/blog/simbolos-funerarios-significado-segun-cultura
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