El Cantor de Caracas

Recientemente, el pasado 25 de julio se cumplieron los 458 años de la fundación de la ciudad de Caracas, Capital de la República Bolivariana, fundada en 1567 con el nombre de Santiago de León de Caracas por Diego de Losada y Samuel Santana tras los intentos fallidos de Francisco Fajardo, en ella se albergan las sedes principales de los organismos que conforman los poderes del Estado, entre ellos el Ejecutivo (Presidencia de la República), el Legislativo (Asamblea Nacional), el Judicial (Tribunal Supremo de Justicia), el Electoral (Consejo Nacional Electoral) y el Consejo Moral Republicano o Poder Moral, integrado por el Ministerio Público, la Defensoría del Pueblo y la Contraloría General, asimismo.

Poco tiempo después de su fundación, la ciudad se convertiría en cabeza de la Provincia, debido principalmente a su clima y a su efectiva defensa montañosa contra corsarios y piratas. Alrededor de 1576 el gobernador Juan de Pimentel la estableció como su residencia, lo cual implicó el tercer cambio de la capital administrativa de la provincia de Venezuela, inicialmente Coro en la costa occidental del país, luego El Tocuyo (aunque no por derecho real) en 1545 y después Caracas en 1578. Desde entonces la ciudad mantuvo la capitalidad de la Provincia de Venezuela, y, a finales del siglo XVIII, con los cambios administrativos realizados por el Imperio español, pasaría a formar parte de la Capitanía General de Venezuela. En 1577 el propio Pimentel había dibujado el primer plano urbano de la ciudad, diseñado de acuerdo con las Ordenanzas de Felipe II que establecían minuciosamente las dimensiones de las calles, plazas, cuadras o manzanas y la disposición ortogonal (es decir, en cuadrícula) de toda la ciudad, indicando la forma como debería ensancharse con el tiempo. El plano de Pimentel de 1578, único que se conserva de la traza de la ciudad hasta 1760, muestra una pequeña ciudad castellana ordenada por cuadras en cuadrícula con 4 calles y 25 cuadras alrededor de una plaza Mayor, como era norma en las ciudades hispanas de Indias.

A la vuelta de los años, al morir el General Juan Vicente Gómez en 1935, la ciudad apenas contaba con 136 mil habitantes y es a partir de 1936, cuando comienza con el General Eleazar López Contreras el proceso de modernización de Caracas que se termina de consolidar entre 1950 y 1960, otorgándole sus características actuales.

Es esa Caracas, posterior a la muerte de Gómez, a la que arriba Luis María Frómeta Pereira, mejor conocido como “Billo” el memorable 31 de diciembre de 1937, para tocar en el Roof Garden, local de baile de aquella época, en el centro de la ciudad. Los hermanos Sabal, empresarios y dueños del local, decidieron cambiar a último momento el nombre de la orquesta, por el de Billo’s Happy Boys sin notificar a Billo Frómeta, dándose inició al resonar de la palabra “Billo” entre los venezolanos.

Según Rosibel Cristina González (2019), Magdalena Frómeta hija de Billo, al ésta rememorar las anécdotas de su padre, manifestó que su progenitor, un joven que salió de su país natal: Santo Domingo, República Dominicana, quien al llegar a Caracas, se sorprendió con aquella montaña imponente que rodeaba la gran ciudad refiriéndose al parque nacional El Ávila.

“…Papá nos narraba de aquella neblina que cubría los techos de las casas, sus edificios. Era una ciudad tranquila, de gente hermosa, cálida, amable, carismática, con algo muy parecido al dominicano, eso hizo la empatía. Papá se enamoró , como cuando se enamora el ser humano por primera vez en su vida…”, relató Magdalena Frómeta, de acuerdo a la publicación en línea de González.

Por otra parte Cesar Muñoz, menciona en uno de sus videos shorts colgados en YouTube que Billo Frómeta, “…es el venezolano más importante que ha nacido en República Dominicana…” y es que para Billo a decir de Oscar Yánez, en 1937 Caracas fue la ciudad más bella del mundo, donde más de dos personas podían reunirse en la Plaza Bolívar y hablar en público,  donde se respiraba libertad, una libertad que no la había  en su tierra natal, donde reinaba el dictador Rafael Leónidas Trujillo Molina, por eso las letras de las composiciones de este caraqueño de origen dominicano, dedicadas a Caracas, eran realmente nacidas de un sentimiento sincero hacia la ciudad que lo acogió con los brazos abiertos en las postrimerías de los años 30. De allí que por ejemplo, en el tema “Caracas pórtate bien” nos dice: “ …Hoy pienso más en Caracas, muchacha traviesa, mi novia ideal; hoy se celebra tu fiesta por eso te vuelvo a cantar…” y es que desde hacía muchos años Luis María Frómeta enamorado de Caracas, se convirtió en su cantor, en el compositor más inspirado en la ciudad fundada por Diego de Lazada el 25 de julio de 1567.

En “Caracas vieja” nos dice Billo: “…Hoy que te vas alejando, con honda tristeza te canto yo a así… Caracas vieja, la de rejas discretas… Caracas vieja, la de dulce canción… contigo llevas, mis más tiernos recuerdos… noches de lunas, serenatas y un balcón…” era esa la Caracas delos techos rojos, la del cerro azul y las palomas blancas, aquella Caracas, que según Aquiles Nazoa, era de pajilla y de bastón y dejaba que un Valentino le robara el corazón…

Billo, realmente amó a Caracas, y ello se retrata fielmente en cada una de las letras que le escribió, como en “Sueño Caraqueño”:

Han cambiado mi Caracas compañero

poco a poco se me ha ido mi ciudad

la han llenado de bonitos rascacielos

y sus lindos techos rojos ya no están

Los pasteles de Tricas después de misa

el pan, pan de Gradilla a Sociedad

los vermouth los domingos por la tarde

donde toda la cuerdita iba a bailar

Se acabo la media lisa de Donzella

Jaime Vivas y el Trianon se fueron ya

ni la India ni la Francia y la Atarraya

Perecito en Palo Grande ya no está

Ya no quedan ni el Roof Garden ni La Suiza

el fronton de Jai-Alay no existe ya

las muchachas ya no van por La Planicie

y a Los Chorros casi, casi nadie va

Indudablemente Billo fue el cantor de Caracas, fue como lo decía Román Martínez Galindo, “…el cronista musical de Caracas…”. Luis María Frómeta Pereira, conocido como Billo Frómeta, nació en Santo Domingo, República Dominicana el 15 de noviembre de 1915 y falleció en Caracas, Venezuela el 5 de mayo de 1988. Fue un músico de apasionado talento, compositor de primera línea y arreglista y director de orquesta fenomenal. Fundador de la orquesta Billo’s Caracas Boys el 31 de agosto de 1940, la cual dirigió hasta el momento culminante de su vida.

Billo, por ejemplo, nos habla sobre la creación del mundo donde a Caracas Dios le dio su bendición, esa pieza es «En Caracas», cuya letra dice:

Cuando Dios hizo el mundo

con inmenso esplendor

a mi linda Caracas le dió

su bendición.

Y por eso Caracas

convertida quedó

en pedazo de cielo

por mandato de Dios.

Dónde el valle amanece brillando

en Caracas

Y la luna se duerme soñando

en Caracas

Dónde brilla más clara una estrella

en Caracas

Dónde están las mujeres más bellas

en Caracas

En Caracas vivirás

y la vida pasarás cantando

y si lejos tú te vas

con Caracas estarás soñando

Dónde nace un cariño profundo

en Caracas

Las mujeres más lindas del mundo

en Caracas

En Caracas, en Caracas…

El 17 de enero de 1916, bajo la presidencia del General Juan Vicente Gómez, es decir un año después del nacimiento de Billo, el Concejo Municipal del Distrito Federal aprobó un contrato para construir un circo o plaza de toros, aprovechando el espacio que ocupaba el antiguo matadero municipal. Así se constituyó la Compañía Anónima Nuevo Circo de Caracas, empresa que inició formalmente las obras en septiembre de ese año, encargado su diseño y construcción a los arquitectos Alejandro Chataing y Luis Muñoz Tébar. Contando con un aforo para doce mil espectadores, la nueva plaza de toros es construida en estilo neo-morisco, utilizando la técnica del concreto armado, la cual era todavía experimantal en Venezuela, siendo abierta al público el domingo 26 de enero de 1919. Cuando Luis María llega a Venezuela, este coso taurino estaba en su apogeo y al cabo de los años y las transformaciones que Billo presenció desde su llegada en 1937 transcurrido el tiempo escribió el pasodoble “Nuevo Circo”:

Nuevo circo nuevo circo

viejo circo caraqueño

porque en el alma del pueblo

siempre es nuevo tu recuerdo

El coraje y la templanza

y el valor de tus toreros

el coraje y la templanza

y el valor de tus toreros

Nunca pierdo la esperanza

antes de que yo me vaya

de tocar un pasodoble

en el medio de tu plaza

Y gritar con toda el alma

nuevo circo de colores

y gritar con toda el alma

nuevo circo de colores

Ahi van Rubito y Serafín

Julio Mendoza y Saleri

van los Girones y el Gran Neri

van Bienvenida y Dominguin

Muchas veces yo he soñado

cuando todo está en silencio

que me visto de torero

y me planto en tu ruedo

A cantar con soleares

coplas, fandangos y tientos

a cantar con soleares

coplas, fandangos y tientos

Porque Caracas me ha dicho

en el medio de mis sueños

eres el circo más lindo

eres el circo más bello

Y la gloria te mereces

porque tú eres caraqueño

y la gloria te mereces

porque tú eres caraqueño

Estas letras son bellas evocaciones de un pasado vivido en plenitud del alma, que Billo retrató de manera tan sentida y original describiendo personajes, como Macario Isidoro Cabrera González, el último cochero que tuvo Caracas, quien había nacido el 2 de enero de 1880, quien se había dedicado a ser cochero y con el tiempo estos vehículos tirados por caballos comenzarían a desaparecer pero Isidoro continuó saliendo todos los días, hasta un año antes de su muerte en 1963, para ofrecer su servicio de transporte, que en la última etapa pasó de utilitario-recreativo a solo recreacional: paseos familiares, excursiones juveniles, serenatas, parrandas y encuentros furtivos. Billo recordándolo a propósito del cuatricentenario de Caracas le escribió el vals “Epa Isidoro”:

Epa Isidoro, buena broma que me echaste,

el día en que te marchaste, sin acordarte de mí serenata.

Epa Isidoro, cuando vuelvas a Caracas,

explícale a las muchachas, que te fuiste lejos, sin decir adiós.

Y sigo pensando que ese viaje tuyo no era necesario.

Ahora que Caracas está celebrando cuatricentenario.

Epa Isidoro, por las calles de los cielos,

en tu coche grande y viejo

la cuerdita nuestra, te recordará.

Son muchos los temas que Billo le escribió y musicalizó dedicados a Caracas, esa ciudad a la que le cantaba “…Caracas,   de mi querer,   cuando ya no esté contigo, no te olvides de tu amigo que te pide por favor pórtate bien…”, porque en “Canto a Caracas” nos deja su última voluntad claramente expresada:

Y es que yo quiero tanto a mi Caracas

que mientras viva no podré olvidar

sus cerros, sus techos rojos, su lindo cielo

las flores de mil colores de Galipán

Y es que yo quiero tanto a mi Caracas

que solo pido a Dios cuando yo muera

en vez de una oración sobre mi tumba

el último compás de alma llanera

Luis María Frómeta Pereira, falleció en su amada Caracas, 5 de mayo de 1988, unos días antes, el 27 de abril, al finalizar el ensayo en el Teatro Teresa Carreño de su tema “Un Cubano en Caracas”, los músicos de la Orquesta Sinfónica Venezuela, al concluirla puestos de pie, le ovacionaron largamente por la compleja composición donde fusiona “El Manicero” del cubano Moisés Simón Rodríguez con el “Alma llanera” del venezolano Pedro Elías Gutiérrez. Al parecer, la emoción de aquel instante impactó en exceso en el ánimo de Billo Frómeta, quien se desplomó, probablemente víctima de una hemorragia cerebral. Entró en estado de coma y, sin recuperar la consciencia, finalmente falleció el 5 de mayo de 1988.

En Barquisimeto, desde el domingo 11 de septiembre de 2015 se cuenta con la Plaza Billo Frómeta, en homenaje a este destacado músico, arreglista y compositor dominicano pero venezolano de corazón, cuya inauguración se efectuó dentro del marco de la celebración de los 463 años de la fundación de la Capital Musical de Venezuela, gracias a la acogida de la idea por parte de la Alcaldía del Municipio Iribarren, con lo cual se le rinde tributo perpetuo en nuestra urbe crepuscular al Cantor de Caracas.

El espacio de la crónica de hoy, incuestionablemente se hizo insuficiente para referirnos a todas las piezas compuestas por Billo dedicadas a Caracas, son muchas y en consecuencia la Reseña de la Añoranza se ha hecho breve, quedando en el tintero muchas curiosidades, referencias y alusiones a lo que reflejó en el legado de su obra este autor dominicano quien enraizó su corazón en Caracas. Nosotros nos encontrábamos en Caracas en los días de su deceso y sepelio, siendo testigos como la Capital de Venezuela se paralizó ante las exequias del cantor de Caracas, el fundador de la “Orquesta más Popular de Venezuela” la “Billo´s Caracas Boys” y mientras sus restos bajaban a su postrera morada, sonaba el último compás de Alma Llanera…

Barquisimeto, domingo 03 de agosto de 2025.

Fuentes Consultadas:

Fundación Wikimedia (2025) Caracas. [Información en Línea] Disponible en: https://es.wikipedia.org/wiki/Caracas

González, R. (2019) «Pórtate bien Caracas» mensaje de un novio, nacido en República Dominicana. [Artículo en Línea] Disponible en: http://caracasciudadplural.blogspot.com/2019/07/portate-bien-caracas-mensaje-de-un.html

Martínez, R. (2002) Epa Isidoro. Confidencias coincidencias de Billos. Editorial Melvin C.A. Caracas. Venezuela.

Pacanins, F. (2011) LUIS MARÍA “BILLO” FRÓMETA. Editorial Arte. Caracas. Venezuela.

LA

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