Durante horas de protestas ese domingo en Perú, un policía fue retenido por los manifestantes en la región de Arequipa, mientras amenazaban con agredirlo e incluso quemarlo, según señalan medios locales. Horas más tarde, fue informado que el agente había sido liberado impregnado con gasolina.
En la jornada los manifestantes lanzaron piedras e intentaron tomar una comisaría en la localidad de La Joya, lo que provocó que agentes lanzaran gases lacrimógenos y perdigones, un conflicto que se alargó durante gran parte de la jornada.
Los enfrentamientos escalaron, según vídeos difundidos en redes sociales, y solo concluyeron cuando llegó un grupo de militares a la zona, tras lo que los policías se retiraron a la carrera de la zona.
Asimismo, manifestantes antigubernamentales quemaron un puesto fronterizo con Bolivia, entre otras sedes públicas, en el sureño departamento de Puno, el segundo incendiado en los últimos tres días, confirmó la Defensoría del Pueblo en su reporte diario.
La institución informó que prendieron fuego a una oficina de la Superintendencia Nacional de Aduanas y de Administración Tributaria (Sunat) y a un puesto de migraciones en Yunguyo, localidad situada a un par de kilómetros de Bolivia.
Además, protestantes incendiaron oficinas del Servicio Nacional de Sanidad Agraria (Senasa) y de la Policía Nacional.
Desde que comenzaron las protestas contra Dina Boluarte a principios de diciembre y que piden el cierre del Congreso, la convocatoria de una asamblea constituyente y adelanto de elecciones, 62 personas han fallecido en enfrentamientos y en sucesos ligados a las marchas.
Fuente: 800noticias