El calendario católico mundial celebra este martes 1° y el miércoles 2 de noviembre el Día de Todos los Santos y el Día de los Fieles Difuntos, respectivamente, fechas ambas “de mucha fe y devoción para todos los católicos”.
La anterior expresión la emitió el padre Humberto Tirado, cura párroco de la iglesia Santa Rosa de Lima, Santuario de la Divina Pastora, de Santa Rosa, cuando este portal noticioso le consultó en cuanto a la significación espiritual de tales fechas.
–El Día de Todo los Santos –aseveró el prelado– es de mucha significación espiritual, porque, en esa fecha, recordamos a todos los santos que han sido canonizados, o sea formalmente proclamados como tales por la Iglesia Católica.
–Pero también recordamos a aquéllos que sabemos están en el cielo, que no han sido todavía proclamados santos, pero que también sabemos están a punto de serlo.
–Y, subsecuentemente, se trata de una festividad religiosa que exhorta a todos los católicos a practicar lo que Cristo predicó, para que tomemos el camino que nos conduzca a la meta final, que es el cielo; es decir, la salvación.
En cuanto al Día de los Fieles Difuntos, “en esta fecha recordamos a las ánimas del Purgatorio, y la madre Iglesia Católica nos invita a orar por ellas durante la jornada”.
-¿Y por qué debemos orar por esas almas? Pues sencillamente porque ellas, las almas de nuestros fieles difuntos, necesitan de nuestras oraciones para pasar del purgatorio, en donde se encuentran, al cielo, y, subsecuentemente, a la salvación.
Recordó el padre Tirado que orar por los fieles difuntos es también una acción de misericordia, y en ella deben involucrarse los católicos de decidida convicción.
–En conclusión –apuntó fin finalmente–, ambas fechas son de una destacada significación para la Iglesia Católica, y la invitación es para que todos los católicos se involucren en la celebración religiosa de ambas jornadas.
Reinaldo Gómez