El Departamento de Energía de EE. UU. comenzará a recopilar datos sobre el uso de electricidad en las minas de criptomonedas, respondiendo a críticas ambientales. La encuesta de la EIA busca comprender la evolución de la demanda energética en este sector y sus fuentes de electricidad. Tras convertirse en un centro líder de minería de Bitcoin, EE. UU. enfrenta preocupaciones sobre el impacto ambiental y los costos energéticos. La iniciativa surge tras solicitudes legislativas y apunta a una mayor transparencia en el sector.
El Departamento de Energía de EE. UU. anuncia que las minas de criptomonedas deberán informar sobre su consumo de energía. La medida responde a críticas ambientales sobre la intensa demanda energética de estas operaciones. La encuesta de la EIA se centrará en la evolución de esta demanda y las fuentes de electricidad utilizadas.
Joe DeCarolis, administrador de la EIA, destaca: «Nos enfocaremos en entender cómo la demanda de energía en la minería de criptomonedas está cambiando, identificando áreas de alto crecimiento y cuantificando las fuentes de electricidad empleadas». La encuesta, que comienza la próxima semana, se implementa tras una solicitud de recopilación de datos de emergencia autorizada por la Oficina de Administración y Presupuesto.
El aumento de la minería de Bitcoin convirtió a EE. UU. en un centro destacado, pero también generó preocupaciones por su impacto ambiental y el aumento de costos energéticos. Legisladores demócratas previamente instaron a las empresas mineras a divulgar su consumo de electricidad y contaminación asociada, sin obtener una respuesta completa. Esta medida busca una mayor transparencia en el sector y podría extenderse a exigir a los servicios públicos compartir datos sobre la electricidad vendida a estas empresas.
Aunque la Asociación Blockchain no ha respondido aún a la solicitud de comentarios, la iniciativa apunta a abordar las preocupaciones sobre el uso de energía en la minería de criptomonedas y promover una industria más sostenible y transparente.
