La operación Weka II tuvo lugar entre el 12 y el 17 de junio, y se zanjó con la detención de 88 presuntos traficantes de personas y 83 pasadores de migrantes, detalló este miércoles Interpol en un comunicado.
También hubo un centenar de arrestos adicionales por delitos como falsificación de documentos o tráfico de armas y drogas, lo que destaca la naturaleza «policriminal» de los grupos del crimen organizado.
Entre los casos más destacados de la operación destaca la detención en Marruecos de un hombre que reclutaba y albergaba mujeres desde Nigeria a Marruecos, para luego enviarlas a España y otros países europeos donde eran obligadas a ejercer la prostitución.
También fue detenido en Costa de Marfil un hombre sospechoso de dirigir un grupo internacional que llevaba mujeres de Guinea y de Marruecos hacia España para ser explotadas sexualmente.
En ambos casos, las pistas para su identificación y detención comenzaron a obtenerse en operaciones previas de Interpol de 2020 y 2021.
«Estas detenciones muestran la amplitud y el valor de las operaciones globales, no solo en el momento, sino en su impacto a largo plazo con la generación de pistas y la creación de redes» entre investigadores de distintos países, señaló el secretario general de Interpol, Jürgen Stock.
Además, en Gambia se desmanteló una red con cinco sospechosos detenidos, que cobraban mil dólares a migrantes para ser llevados a las Islas Canarias (España).
Y en numerosos países de Oriente Medio y África se desmantelaron redes de trata de personas, atraídas con falsas promesas de trabajo y que luego eran sometidas a esclavitud laboral, con cerca de 700 rescatados.
Además, se identificaron unos 4.000 migrantes de 29 nacionalidades en proceso de ser transportados por redes de tráfico a otros países.