El presidente de la Asamblea Nacional, Jorge Rodríguez, ha reiterado una contundente advertencia: todo extranjero que intente ingresar a Venezuela sin la debida autorización será detenido. Rodríguez recordó las «operaciones» de años pasados, en las que se intentaron incursiones por las costas de La Guaira y Aragua, y aseguró que el mismo destino les espera a quienes intenten «mancillar el sagrado mar y territorio de Venezuela».
En sus declaraciones, Rodríguez afirmó que Venezuela defenderá su paz, independencia y soberanía «hasta con nuestra propia vida». La advertencia, que ya había expresado en agosto, no busca una confrontación, sino que responde a la «obligación de defender este suelo sagrado».
Las palabras de Jorge Rodríguez se producen en un contexto de altas tensiones con Estados Unidos, marcadas por un despliegue militar en aguas del Caribe. Aunque Washington argumenta que la operación es una lucha contra el narcotráfico, el gobierno de Maduro asegura que su verdadero fin es un «cambio de régimen».
A pesar de que, presuntamente, el presidente Nicolás Maduro ha enviado una carta a Donald Trump para retomar las conversaciones, la administración estadounidense ha redoblado su campaña de presión. Trump ha advertido que el gobierno venezolano pagará un «precio muy alto» si no recibe a sus prisioneros y pacientes internados en instituciones psiquiátricas.