La llegada de Google Zero plantea una pregunta crucial: ¿qué sigue ahora? La búsqueda, omnipresente en la web, está evolucionando y transformando su papel como plataforma invisible que moldea todo el ecosistema digital.
Desde la generación de tráfico en la Búsqueda hasta la optimización para Google Chrome y la monetización a través de sus tecnologías publicitarias, la influencia de Google es innegable. Sin embargo, esta omnipresencia puede hacer que su funcionamiento sea casi invisible.
Para entender el cambio, es útil considerar la relación de los creadores con las plataformas, como YouTubers y TikTokers, y su dependencia de los algoritmos de estas plataformas. En este sentido, toda la web puede considerarse la plataforma de Google, donde los creadores construyen sus negocios.
La teoría de «Google Zero», donde Google Search deja de enviar tráfico a sitios de terceros, plantea desafíos significativos. A pesar de las preguntas planteadas a líderes de Google y a ejecutivos de medios sobre el impacto de esta transición, aún no hay respuestas claras. Mientras que los gigantes de los medios pueden pensar en cómo adaptarse, para muchas pequeñas empresas, Google Zero ya es una realidad.
Un ejemplo revelador es el caso de HouseFresh, un sitio dedicado a reseñar purificadores de aire, que documentó cómo las prácticas de SEO de los grandes jugadores han afectado su tráfico de búsqueda y su negocio en general.
En este contexto, la adaptación se vuelve crucial. Aquellos como Gisele de HouseFresh, cuyos contenidos son absorbidos por Google pero no necesariamente servidos a los usuarios, están desarrollando estrategias para sobrevivir en este nuevo entorno.
En conclusión, el panorama digital está cambiando, y la capacidad de adaptación será fundamental para todos los actores involucrados. Google Zero representa un punto de inflexión, y las estrategias de SEO y la diversificación de fuentes de tráfico serán clave para navegar este nuevo escenario.