En un ambiente de profunda espiritualidad, feligreses y religiosos celebraron los 322 años del inicio de la devoción a la Divina Pastora y a su vez conmemoraron la natividad de la virgen María que coincide este lunes 8 de septiembre. Con motivo a esta importante fecha, una vez más la sagrada imagen de la Divina Pastora, en hombros de sus fieles, salió en procesión por los alrededores de la plaza del pueblo de Santa Rosa, en Barquisimeto, estado Lara.
Para Oberto Montenegro, miembro de la Sociedad Divina Pastora, este día demuestra «el amor del pueblo hacia la madre», por lo que afirmó que Santa Rosa «siempre estará unida a Barquisimeto» por su fervor mariano.
Recordó que la devoción de la Divina Pastora, surgió en Sevilla, España, bajo un sueño que tuvo un fray, «esa es una devoción que salió en procesión, por primera vez, un día como hoy, pero pintada sobre un estandarte, hoy se están cumpliendo los 322 años».
Inspirado en el cielo crepuscular de Barquisimeto
Para los devotos de la Divina Pastora, este día representa una oportunidad única para renovar la fe e incluso para expresarle agradecimiento y amor a través de un vestido. Tal es el caso de Edgar Molina, quien donó el traje que lució la virgen, inspirado en el cielo crepuscular de Barquisimeto.
«En esta oportunidad se utilizó un tono en color naranja que simula los crepúsculos de Barquisimeto (…) yo pude contactar al diseñador caraqueño Luis Sifón, él me dijo que me podía colaborar para realizar este hermoso trabajo; el significado del vestido es muy importante, el niño está vestido de azul, que es el amanecer de la ciudad de Barquisimeto y la virgen es el ocaso, simulando ese nuevo amanecer que nuestro señor Jesucristo nos regala», indicó Molina.
Así, este barquisimetano cumplió su sueño de ofrendar un vestido a la virgen y reafirmar su fe a la madre de Dios, justo en los 322 años de la devoción pastoreña.
Salud y paz
Por su parte, Yuraima Piña, paciente ontológica, acudió junto a su familia, al templo de Santa Rosa, para venerar a la virgen y a su vez para pedirle que interceda por su salud.
«Ahorita estoy pasando por un momento muy difícil y mi fe sigue intacta porque siempre ha sido para mí una devoción muy grande con la virgen, llámese virgen de Coromoto, Divina Pastora, cualquiera de las vírgenes, hoy más que nunca tengo la fe puesta en la virgen, en la iglesia», expresó Piña.
En tanto, para Edgar Molino proveniente del oriente del país, este día significa un momento especial y único para los feligreses, que a través de la oración y cánticos religiosos acompañan con regocijo a la Divina Pastora de las Almas.
«De verdad que me emociona mucho el poder estar aquí, pidiendo por la salud de nuestros familiares, de todas las familias de Venezuela y el mundo, y por la paz de nuestro país, hoy también se celebra en Portuguesa, Guanare, la última aparición de Nuestra Señora de Coromoto, es el día más mariano del año», relató.
Los devotos acompañaron a Divina Pastora en su última procesión por este año, en el Pueblo de Santa Rosa, un momento especial que les permitió elevar sus oraciones por la salud y el bienestar del pais.