En fechas recientes la artista plástico Carly García, presentó un proyecto que consiste en la elaboración del primer mural ecológico en la ciudad de Barquisimeto, el cual se realizaría con el objetivo de sensibilizar a la comunidad sobre el arte y el cuidado del medio ambiente, tan necesitado en los actuales momentos.
Diversas instituciones educativas de la ciudad crepuscular en conjunto con la comunidad y diversas empresas privadas, se activaron y forman parte del proyecto “La llama de la conciencia”, quienes indicaron que todo se encuentra dispuesto para comenzar a llenar de color las paredes de la Casa Hogar Amigos del Niño Especial, ubicada en el populoso sector de El Cercado, parroquia Santa Rosa del municipio Iribarren.
Dicho mural se realizará con tapas plásticas, miles de estas, lo cual da un perfil concientizador respecto al uso de los envases plásticos, tan perjudiciales en la conservación del medio ambiente y luego de una ardua labor de recolección de estas tapas plásticas, la artista Carly García tiene todo listo para iniciar con la ejecución de esta obra.
García aprovechó la oportunidad de agradecer al profesor y arquitecto César Figueroa, quien apoyó en la digitalización de este diseño: “Agradecemos Infinitamente a todos los que han sumado su granito de arena, especialmente a César Figueroa quien nos apoyó con la digitalización de los planos, el nos permitió soñar y grabar en nuestros corazones el compromiso de hacer este hermoso proyecto”, apuntó.
Los estudiantes del Liceo Tamaca modalidad adultos y jóvenes tuvieron el privilegio de iniciar junto a la comunidad de El cercado los trabajos de recuperación de espacios y preparación del cerco perimetral, acompañados por la profesora Carmen López y Durbis Caicedo, quienes destacaron que la institución tiene dos años en recolección de tapas.
«Esto no es una moda es un impacto positivo en todo Barquisimeto el arte ecológico busca humanizar y sensibilizar a toda la colectividad larense en torno al tema ambiental», explica la profesora Carmen López.
Fotos: Cortesía Carmen López