«Hemos encontrado edificaciones que no cumplen con las variables urbanas fundamentales, debido a que al solicitar el permiso presentan un proyecto acorde a unos requerimientos pero, al momento de construir, remodelar o ampliar, cambian todo completamente».
Así lo acusó Anivet Reyes, directora de la Dirección de Planificación y Control Urbano (DPCU), de la Alcaldía de Iribarren, basándose en las últimas inspecciones que han practicado en la ciudad, tras las cuales varias construcciones han sido paralizadas.
Por ello exhortó a tramitar ante el organismo a su cargo, los permisos de ley con las variables urbanas correspondientes al uso que darán a la infraestructura, ya sea sea nueva, remodelada o ampliada. De lo contrario, recordó, los propietarios de las construcciones están expuestos a multas pecuniarias, paralización de la obra y hasta la demolición de la misma.
Recordó que la oficina de la DPCU está ubicada en el piso 3 de la Torre Municipal, donde se brinda asesoría de los trámites a efectuar.
Construcciones históricas
Una obra que sí está permisada, incluso por los organismos con competencia en el patrimonio cultural, es la rehabilitación de la Casa Grande, el Museo de Barquisimeto, la cual comenzó en enero de 2022, abarcando 5.000 mts2 de infraestructura a recuperar. Según la municipalidad, en los próximos meses finalizarían los trabajos.
Ebanistas, carpinteros, herreros y personal con destrezas en la restauración de piezas antiguas, trabajan respetando los diseños originales para conservar la memoria arquitectónica y el patrimonio cultural del municipio, como lo apreció el presidente de la Fundación Museos Nacionales, Clemente Martínez, de visita en la capital larense.