Kim Jong-un mostró este jueves al ministro de Defensa ruso las armas más nuevas y avanzadas de Corea del Norte, caminando entre enormes misiles balísticos intercontinentales y drones militares nunca antes vistos, informaron los medios estatales.
Después de que Washington acusara a principios de año a Pyongyang de suministrar armas a Moscú para su guerra en Ucrania, unas fotografías publicadas por los medios estatales mostraban a Kim paseando a Serguei Shoigu, ministro de Defensa de Moscú, por una amplia exposición de defensa en la que se exhibían los misiles nucleares del Norte y lo que, según el sitio especializado NK News, con sede en Seúl, eran nuevos vehículos aéreos no tripulados (UAV).
Shoigu y una delegación china de alto rango se encuentran en Pyongyang como los primeros invitados extranjeros conocidos de Kim desde el inicio de la pandemia de Covid-19, cuando el país conmemora el 70 aniversario del armisticio de la Guerra de Corea, que puso fin a las hostilidades abiertas y se celebra como el Día de la Victoria.
Kim y Shoigu visitaron la “Exposición de armas y equipos 2023″, según informó la Agencia Central de Noticias de Corea, y mostraron fotos en las que aparecían los misiles balísticos intercontinentales más grandes de Corea del Norte, el Hwasong-17, y el ICBM de combustible sólido Hwasong-18.
Rusia, aliado histórico de Corea del Norte, es uno de los pocos países con los que Pyongyang mantiene relaciones amistosas.
Kim y Shoigu habían discutido previamente “asuntos de interés mutuo en el ámbito de la defensa y la seguridad nacionales y sobre el entorno de seguridad regional e internacional”, dijo la KCNA.
El líder norcoreano se ha mostrado firme en su apoyo a la invasión de Ucrania por Moscú, incluido, según Washington, el suministro de cohetes y misiles, acusación que Pyongyang ha negado.
Durante la visita, Kim habló a Shoigu “de las armas y equipos inventados y producidos” en el marco del plan de defensa nacional norcoreano y “expresó repetidamente su convicción de que el ejército y el pueblo rusos lograrían grandes éxitos”, añadió la KCNA.
La visita de Shoigu es digna de mención dado que los ministros de Defensa rusos no han visitado regularmente Pyongyang desde antes del colapso de la URSS, dijeron los expertos a AFP. “Rusia puede necesitar el potencial de la industria militar norcoreana en el ámbito de las armas convencionales, mientras que Corea del Norte puede estar interesada en las transferencias de tecnología de misiles de Rusia”, declaró a la AFP Vladimir Tikhonov, profesor de estudios coreanos en la Universidad de Oslo.
A pesar de la gran repercusión de la visita de Shoigu, es probable que Corea del Norte sea “muy prudente” a la hora de proporcionar armas a Moscú para su guerra en Ucrania, declaró a la AFP Park Won-gon, profesor de la Universidad de Ewha.
“Si se confirma públicamente, los países europeos también se volverán adversarios”, dijo Park, añadiendo que Corea del Norte preferiría no enfrentarse a sanciones adicionales. “Así que tendrá cuidado, pero es posible que Rusia busque más ayuda en secreto”.
Juntos en un recital
Kim Jong-un acudió en Pyongyang a un recital de música para celebrar los 70 años del fin de la Guerra de Corea (1950-53) en compañía del ministro Shoigu y Li Hongzhong, miembro del Politburó del Partido Comunista de China (PCCh), escenificando la especial cercanía entre Pyongyang, Moscú y Beijing.
Los tres se sentaron juntos y quedaron flanqueados por otros miembros del Presidium del Politburó del Partido de los Trabajadores norcoreano como Choe Ryong-hae, Ri Pyong-chol, Kim Tok-hun o Jo Yong-won, para presenciar la actuación de varias agrupaciones musicales, como el Coro Estatal Benemérito, el grupo de instrumentistas del Comité de Asuntos Estatales y el Conjunto Artístico Wangjaesan, informó la agencia estatal KCNA.
El recital, que arrancó a la medianoche entre el miércoles y el jueves (15.00 GMT del jueves) celebra la firma del armisticio que puso fin a la guerra el 27 de julio de 1953, fecha que Corea del Norte conmemora como “Día de la Victoria”, puesto que en la narrativa del régimen se forzó a EEUU y a sus aliados a rubricar un alto el fuego.
Durante el acto se interpretaron conocidas canciones patrióticas norcoreanas como “Himno al Mariscal Kim Il Sung” y también “canciones chinas y rusas, interpretadas especialmente en honor de los enviados amistosos que están de visita en Pyongyang”.
Primeros extranjeros
Las imágenes por satélite indican que Corea del Norte ha estado preparando un desfile militar a gran escala para el aniversario del jueves.
La inclusión de invitados extranjeros en las celebraciones de este año es una primicia tras la pandemia e insinúa una nueva flexibilidad a la hora de aplicar los controles fronterizos.
El ejército de Seúl declaró que las “autoridades de inteligencia” de EEUU y Corea del Sur “están vigilando de cerca” la preparación del desfile de Pyongyang, añadiendo que también están siguiendo las “tendencias de desarrollo armamentístico” del país.
“Estamos analizando los sistemas de armamento presentados por Corea del Norte y, por el momento, no tenemos nada más que decir”, declaró un portavoz del Estado Mayor Conjunto.
Corea del Norte ha impuesto un rígido bloqueo Covid-19 desde principios de 2020, que impide la entrada en el país incluso a sus propios ciudadanos.
Beijing es el aliado y benefactor económico más importante de Corea del Norte, su relación se forjó en el derramamiento de sangre de la Guerra de Corea en la década de 1950.
Kim Jong-un también se reunió con Li Hongzhong y le dijo que “el pueblo coreano nunca olvidará el hecho de que los valientes soldados de los Voluntarios del Pueblo Chino derramaron sangre para lograr la victoria en la guerra”, dijo KCNA.