La Orquesta Sinfónica Nacional de Chile, es la agrupación sinfónica de más larga trayectoria del país austral, la primera creada como organización estatal, permanente y duradera, la cual es considerada Patrimonio de la Nación y en fecha reciente le brindó un reconocimiento a su director principal, el barquisimetano Rodolfo Saglimbeni, acto y concierto llevado a cabo en el Teatro CEAC (Centro de Extensión Artística y Cultural) de la Universidad de Chile.
Saglimbeni informó que para el transcurso de esta semana la orquesta ofrecerá dos conciertos en el reconocido Festival Internacional las “Semanas Musicales de Frutillar”. Dichos conciertos serán lo del cierre de esta edición del festival, por eso la importancia de los mismos, destacando que esta organización es altamente reconocida en toda la nación.
“Luego de estos compromisos, estaré cerca de mes y medio en Venezuela, donde trabajará con la Orquesta Sinfónica Municipal de Caracas, donde cumpliré 20 años como su director artístico, para luego regresar a Santiago al inicio de la temporada de conciertos en marzo, donde la tónica será la normalidad recobrada luego de la pandemia”, destaca Saglimbeni ante el micrófono de Rafael Rodríguez, colaborador de El Informador Venezuela en Santiago de Chile.
El director expuso ante el micrófono su orgullo y sentimiento que le causó dirigir recientemente a la Orquesta Nacional de Chile en la Plaza Baquedano o Plaza Italia, donde la obra fue la Novena Sinfonía de Beethoven, un lugar conocido como el centro neurálgico no solo de Santiago, sino de toda Chile, un lugar donde se celebra, se conmemora, se pelea, se lucha, es el lugar de las grandes concentraciones de los triunfos deportivos, sociales, culturales.
“En esta plaza se manifiesta en los actos políticos y también ha habido algunas revueltas, lo que alejó un poco al público, pero esto fue una verdadera conmemoración genuina y esto es un encuentro, donde estamos recuperando espacios y fue un regalo de la Universidad de Chile para toda la gente de Santiago, calculamos unas ocho mil personas y la Novena Sinfonía de Beethoven lleva un mensaje de hermandad, de unidad y sobretodo de libertad, que es lo que quiere la gente”.
Fotos: Rafael Rodríguez
