Cada vez que se acerca el 24 de diciembre, las familias aprovechan para recorrer el centro de Barquisimeto, una zona conocida por su alto movimiento comercial, para comprar la ropa o los «estrenos» así como juguetes a los más pequeño de la casa.
Sin embargo, en una consulta por el equipo de El Informador Venezuela, tanto los usuarios como vendedores, afirmaron que la realidad es otra, debido a la actual economía del país que ha incidido en esta temporada navideña.
«Estos muñecos a seis dólares BCV, llevan dos semanas expuestos en vitrina, solo se han vendido dos», expresó el dueño de un negocio, al recordar que esos mismos muñecos el año pasado tenían ese valor, sin embargo, debido a la variación de la tasa oficial del Banco Central de Venezuela, hoy día representan 3 dólares.
Otros comerciantes, que prefirieron resguardar su identidad, contaron que desde que inició el mes de diciembre no han logrado vender sus juguetes, afirmaron que hoy día la prioridad de las familias es otra, por ejemplo, «llevar el pan a sus casas».
Desde bicicletas, carros montables, muñecas, juegos de cocina, juegos de mesa, peluches, pelotas, son algunas de las opciones que ofrecen los comerciantes, con una variedad de precios que rondan desde 2,5 hasta 120 dólares aproximadamente, y que en la mayoría de los locales visitados, afirmaron que sus inventarios corresponden al año pasado, al tiempo que, reconocieron que la tendencia ha sido la compra de equipos electrónicos para los niños, como tablets o consolas de videojuegos.
«Es difícil poder comprar, hago el esfuerzo por un juguete para mi hijo, pero no es fácil cuando el dólar sube todos los días, busco lo más asequible», dijo Fabiana Rivas, una madre acompañada de su pequeño.
Este panorama también se repite con la compra de ropa y calzado, para los estrenos del 24 o 31 fin de año, aunque existen en algunos locales facilidades de pago mediante sistema de crédito, no resulta suficiente para algunas personas que manejan un presupuesto de 50 dólares para comprar al menos dos pares de zapatos de niños. Tal es el caso, de Olga Colmenárez, una abuela barquisimetana, que buscaba ofertas de calzados para sus nietos.
«Toca caminar bastante para conseguir zapatos, la mayoría están por encima de los 25 dólares, estoy tratando de estirar el dinero», contó.
Es así, que algunas familias se encuentran en el «dilema» sobre qué comprar, mientras que los comerciantes siguen con sus santamarías abiertas a la espera lograr más de una venta.
Fotos: Julio Colmenárez
