El fiscal general de Venezuela, Tarek William Saab, acusó este viernes a Estados Unidos de utilizar el tema de los derechos humanos como una herramienta de agresión contra países que no se alinean con sus intereses, incluyendo a Venezuela. Esta declaración se produjo en respuesta al informe presentado por la Misión Independiente Internacional de Determinación de los Hechos de las Naciones Unidas, que ha documentado presuntas violaciones de derechos humanos y crímenes atribuidos a las autoridades venezolanas.
Saab calificó el informe como un «montaje sin pruebas», argumentando que la misión, establecida en 2019, busca socavar las relaciones entre el Estado venezolano y la Oficina del Alto Comisionado de Derechos Humanos de la ONU. «Estados Unidos utiliza el tema de los derechos humanos para agredir a los países que no le son afectos», afirmó Saab, quien también criticó la falta de legitimidad de la misión, señalando que no ha realizado investigaciones en el terreno ni ha presentado evidencias concretas.
El fiscal destacó que el Ministerio Público venezolano ha llevado a cabo 550 diligencias con 40 medios de prueba distintos en relación con los hechos mencionados en el informe de la misión. «Ellos no pisaron Venezuela», subrayó, refiriéndose a lo que considera una ausencia de pruebas verificables en el documento. Saab concluyó que el informe carece de fundamento y representa una intervención política motivada por Estados Unidos, disfrazada de defensa de los derechos humanos.
Esta declaración se produce en un contexto de creciente tensión entre Venezuela y Estados Unidos, donde las acusaciones de violaciones a los derechos humanos han sido un tema recurrente en la agenda internacional. La postura de Saab refleja la estrategia del gobierno venezolano de rechazar las críticas externas y reafirmar su soberanía ante lo que considera injerencias extranjeras.
