El Papa Francisco no testificará, como habían pedido algunas defensas, en el juicio que se sigue en el Vaticano por supuestas irregularidades financieras, cuyo principal imputado es el cardenal Angelo Becciu, mientras que sí declarará el arzobispo venezolano Edgar Peña Parra, adjunto de la Secretaria de Estado vaticana.
El presidente del Tribunal del Estado de la Ciudad del Vaticano, Giuseppe Pignatone, informó este jueves de los testigos admitidos a declarar entre los solicitados por las defensas de este proceso en el que están imputadas 10 personas por la gestión de los fondos de la Secretaría de Estado vaticano.
Entre ellos, figura monseñor Peña Parra, mientras que la corte se ha reservado su decisión sobre la eventual declaración el secretario de Estado, el cardenal Pietro Parolin, que se tomará a tenor de la deposición de su adjunto.
El pontífice, cuya declaración había sido solicitada por varias defensas, no comparecerá como testigo, en tanto que sí han sido admitidos, entre otros, el presidente de Ior, el banco vaticano, Jean-Baptiste de Franssu, y el hermano del cardenal Becciu, Antonino.