Alrededor de una tercera parte de los palestinos que fallecieron durante el más reciente episodio de violencia entre Israel y combatientes de Gaza pudieron haber muerto por cohetes errantes lanzados por el lado palestino, según una evaluación militar de Israel que parece coincidir con las investigaciones independientes de The Associated Press.
Las fuerzas armadas de Israel informaron que 47 palestinos murieron durante los combates del fin de semana, y que al menos 14 de ellos fallecieron por cohetes lanzados por la Yihad Islámica que no llegaron a su objetivo.
Nadie en Gaza con conocimiento directo de las explosiones en cuestión quiso hablar públicamente al respecto. Pero imágenes televisadas en vivo mostraron proyectiles de extremistas que caían en vecindarios residenciales densamente poblados. Y las visitas de la AP al lugar de dos de las explosiones en las que murieron un total de 12 personas corroboraron las sospechas de que fueron producto de cohetes que se desviaron de su trayectoria.
Israel clamó victoria en los enfrentamientos del fin de semana, en parte porque abatió a dos altos comandantes de la Yihad Islámica y porque ningún israelí murió o resultó herido de gravedad. Si resulta que la Yihad Islámica causó daño a algunos de los que dice proteger, sería un resultado humillante para el grupo extremista y su principal patrocinador, Irán.
En Gaza, el grupo gobernante Hamas vigila muy de cerca a la disidencia, y muchos palestinos consideran a los grupos armados como combatientes por la libertad que defienden a su patria de la agresión israelí.
Israel afirmó que únicamente atacó a combatientes y que tomó todas las medidas para evitar bajas civiles. Pero por lo menos una de sus ofensivas, en la que se abatió a un alto comandante de la Yihad Islámica en la ciudad de Rafah la noche del sábado, también cobró la vida de cinco civiles después de que Israel derribó una vivienda y causó graves daños en otras.
Los enfrentamientos comenzaron el viernes cuando Israel lanzó una ola de bombardeos contra la Yihad Islámica por lo que sus fuerzas armadas describieron como una amenaza inminente para los israelíes que viven cerca de la frontera con Gaza. Para el momento en que entró en vigor una tregua la noche del domingo, la Yihad Islámica ya había lanzado cientos de cohetes hacia Israel, mientras que las aeronaves israelíes ya habían impactado decenas de supuestos objetivos extremistas.
El ejército israelí aseguró que los extremistas lanzaron alrededor de 1.100 proyectiles, de los cuales unos 200 cayeron dentro de territorio palestino.
El ministerio de Salud palestino señaló que 46 palestinos murieron durante los tres días de combates, incluyendo 16 niños y cuatro mujeres. La agencia no hace distinción entre civiles y combatientes.
Fuente: AP
