El presidente de Perú, José Jerí, anunció este martes la declaración de estado de emergencia en la capital del país, Lima, así como en su área metropolitana y la vecina ciudad de Callao. La medida, que entrará en vigencia a las 00 horas de hoy por un período de 30 días, busca ser un punto de inflexión en la lucha contra la creciente ola de inseguridad.
En un breve mensaje televisado, Jerí fue enfático al declarar: «Se acabó: hoy empezamos a cambiar la historia en la lucha contra la inseguridad en el Perú». El mandatario destacó que su plan de seguridad no es más de lo mismo, sino que representa un «nuevo enfoque» en el cual el Gobierno «pasa de la defensiva a la ofensiva en la lucha contra el crimen».
El objetivo principal de esta declaratoria es «recuperar la paz, la tranquilidad y la confianza de millones de peruanos» que se han visto afectados por el hampa. Con el estado de emergencia, el Ejecutivo busca demostrar que «Las guerras se ganan con acciones, no con palabras», implementando medidas concretas para desarticular las redes criminales.
Esta decisión llega apenas cinco días después de que el primer ministro anunciara un plan similar, y en un contexto político interno tenso, con el Congreso rechazando una moción de censura contra Jerí. La población espera ahora la implementación de estas acciones ofensivas que prometen devolver la seguridad a las calles de Lima y Callao.
