La Organización Miss Universo (MUO), anunció el domingo 14Dic, el traslado “inmediato” de su sede administrativa de Ciudad de México a Nueva York, Estados Unidos, una decisión que ocurre mientras los propietarios, el mexicano Raúl Rocha y la tailandesa Anne Jakrajutatip, enfrentan escándalos por procesos legales.
“Esta decisión surge de una evaluación exhaustiva y responsable de las condiciones actuales en México, que no ofrecen un entorno adecuado ni estable para la operación segura y eficaz de una organización internacional de esta envergadura”, detalló la organización a través de un comunicado publicado en su página web.
En ese sentido, detalló que, entre los factores considerados se encuentran “la incertidumbre jurídica, la actual situación de seguridad y los ataques infundados y con motivaciones políticas que han comprometido el marco institucional necesario para la estabilidad operativa a largo plazo y la proyección global”.
La compañía prevé llevar a Nueva York al personal existente «que sea posible» y realizar nuevas contrataciones. Este movimiento coincide con la reciente salida de Mario Búcaro, excanciller de Guatemala, del puesto de director ejecutivo.
MUO insistió que la relocalización es una decisión tomada «con firmeza, responsabilidad y con el futuro a largo plazo de la organización como prioridad». Además, reitera su compromiso con «la integridad institucional y la protección de su legado» de 74 años.
El copropietario Raúl Rocha es actualmente investigado por la Fiscalía mexicana por presuntos lazos con el crimen organizado, incluyendo narcotráfico, contrabando de combustible y tráfico de armas. Medios mexicanos, citando fuentes oficiales, indicaron que las autoridades de Hacienda bloquearon este mes cuentas bancarias a su nombre debido al caso. Además, Rocha enfrenta acusaciones de favorecer a la representante de México, Fátima Bosch, ganadora de la edición 74.
Por otra parte, a finales de noviembre, un tribunal de Tailandia emitió una orden de arresto contra Anne Jakrajutatip, la copropietaria del otro 50 % de Miss Universo, por no comparecer en un supuesto caso penal de fraude cercano al millón de euros, sin relación con el concurso reciente.
