En Venezuela, en los últimos años, se ha hecho una realidad la utilización y expansión masiva del Internet mediante la utilización de la llamada fibra óptica, que no es otra cosa que cables cubiertos con el mismo material de los cables comunes y corrientes, pero que contienen en su interior es vidrio, y no alambre de aluminio, o de cobre, etc., lo cual, por supuesto, implica un adelanto tecnológico “de alta factura”, como tal vez diría un experto.
Ahora, ello se ha notado más desde el 2019, cuando el gobierno lanza el plan denominado “La fibra óptica llega al hogar”, aun cuando si bien es cierto que la tecnología de fibra óptica ya venía siendo desplegada por algunas otras empresas privadas desde antes de esa fecha.
Y aun cuando Internet llegó a Venezuela en la década de 1990, las conexiones de banda ancha, y específicamente la fibra óptica para uso residencial y comercial, se consolidaron y expandieron notablemente a partir de los años recientes.
Detalles claves
En agosto de 2019, como antes se indicó, se aprobó la inversión para el plan de Cantv, “La Fibra Óptica Llega al Hogar”, a objeto hacer llegar Internet de alta velocidad a los hogares y oficinas en todo el país.
Rol de empresas privadas:
Antes y después de 2019, empresas como NetUno, entre otras, comenzaron a desplegar sus redes de fibra óptica, habiéndose expandido a varias ciudades del país.
Pero la expansión de “cableras” –para decirlo en buen criollo, y sin segundas intenciones–, con todo el significativo adelanto tecnológico que ello ha significado, también ha originado algunas situaciones que pudiéramos llamar problemáticas, de alguna manera.
Y una de ellas lo es el hecho de que todas esas “cableras”, hasta donde tenemos conocimiento, han extendido –o instalado— por vía aérea sus redes comunicacionales, es decir, a través de cables de fibra óptica que han sido extendidos desde la parte superior de los postes del alumbrado público.
Ello ha traído como consecuencia el que se haya creado una especie de “maraña” de cables en una gran cantidad de esos postes, lo que origina, en primer lugar, una visión no muy estética de esas “marañas”; en segundo lugar, no sabemos si un riesgo de incendio por cortocircuito, tal como ocurrió hace dos o tres días en la carrera 21 con calle 40 de Barquisimeto, lo que afortunadamente no pasó a mayores, y, en tercer lugar, tal vez obstrucción en sus mismos sistemas de comunicación, por ese amontonamiento de cables en un mismo punto.
Nos hemos permitido incluir esta especie de prólogo, previa declaración escrita que, al respecto, solicitamos del ingeniero civil y tasador –y además consultor inmobiliario– Omar Gil Pereira, quien tuvo la gentileza de acceder a ello, la cual, bastante detallada, reproducimos textualmente, sin quitarle ni ponerle, y quien, por cierto, aborda el tema, no solamente desde el punto de vista estético, sino de una manera integral en sus diferentes aspectos.
He aquí textualmente sus observaciones:
La vertiginosa demanda de conectividad de alta velocidad ha provocado una visible proliferación de cableado aéreo de fibra óptica en las ciudades venezolanas, tejiendo una intrincada «telaraña digital» sobre el paisaje urbano. Si bien este fenómeno es un indicativo del crecimiento del sector de telecomunicaciones y de la urgencia por mejorar los servicios de internet, también genera importantes desafíos estéticos y de seguridad, y tiene implicaciones en contribuir seguramente en un menor valor de los inmuebles de un sector.
Para comprender y abordar esta compleja situación desde una perspectiva constructiva, hemos consultado a profesionales y analizado los documentos oficiales, incluyendo el Plan Nacional de Telecomunicaciones (PNT) 2023-2025, que esboza una estrategia del Estado para el desarrollo tecnológico y la soberanía del país.
Diagnóstico: El Tejido de la Proliferación
El diagnóstico actual revela una problemática multifactorial, arraigada en un contexto de rápido avance tecnológico y desafíos de infraestructura. El profesional consultado señala que la expansión del cableado aéreo es «un reflejo del crecimiento del sector de telecomunicaciones en Venezuela» y de la «urgente necesidad de mejorar la conectividad y la velocidad de internet» ante el alcance actual del servicio de CANTV.
Las causas principales se resumen en:
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El sector requiere de la planificación y regulación:
◦ Hay la necesidad de una gran inversión y mantenimiento en la infraestructura Subterránea, que no ha estado a la altura de la demanda del servicio. Este trabajo lo hizo en el Pasado la CANTV a través de una gerencia de interconexión, que prestaba su fibra a otras operadoras, lo cual era una prioridad que ha perdido vigencia.
◦ Se requiere, además, de un marco regulatorio claro y de control, y una eficiente fiscalización por parte del ente regulador de las comunicaciones y las autoridades locales. Se requiere de una aplicación consistente de normas técnicas y reglamentos (como la Ley Orgánica de Telecomunicaciones y la NTF 4049:2015 sobre uso compartido de postes, y el reglamento para retirar cableado obsoleto).
◦ Es necesaria una coordinación efectiva entre operadoras, la compañía eléctrica y las alcaldías para que se logre una coordinación efectiva entre las empresas para evitar que cada empresa instale su propio cableado sin un plan maestro.
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Desafíos Económicos y Logísticos para las Operadoras:
◦ La instalación subterránea es significativamente más costosa, compleja y requiere de una inversión inicial mucho mayor que el tendido aéreo. Un proyecto subterráneo se lleva fácil de dos a tres meses e implica permisos de obra, excavación y ductos especiales.
◦ En un entorno económico volátil, «las empresas se decantan por la opción más rápida y económica para comenzar a ofrecer servicios y generar ingresos» y responder a la alta demanda de los usuarios.
◦ Muchos postes existentes están en mal estado o carecen de la capacidad para soportar la carga adicional de múltiples cables de fibra óptica.
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Falta de Cultura de Mantenimiento y Cumplimiento de Normas:
◦ En algunos casos, el personal no está debidamente calificado para instalaciones de fibra óptica, lo que puede resultar en problemas de calidad, como curvas excesivas o empalmes deficientes.
◦ Las empresas se enfocan en la expansión, pero descuidan el mantenimiento de la red instalada, lo que lleva a cables caídos, peligrosos o en desuso. Recientemente el gobierno ha emitido un reglamento para el retiro de cableado obsoleto y en mal estado en zonas urbanas.
Soluciones: El Camino Constructivo Hacia un Ordenado Futuro Digital
La solución a esta problemática demanda un enfoque integral y colaborativo, involucrando a todos los actores claves con un sentido de responsabilidad y una visión a largo plazo, que se enmarque dentro con los objetivos del Plan Nacional de Telecomunicaciones.
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Regulación y Fiscalización Estricta por Parte del Estado (Comisión Nacional de Telecomunicaciones, Alcaldías, CANTV):
◦ En cuanto al Plan Nacional de Telecomunicaciones 2023-2025, ello representa una propuesta para la modernización de la infraestructura de telecomunicaciones. Este plan es fundamental, ya que sus «Ejes Focales» buscan un «Despliegue de Infraestructura Fija» que incentiva el despliegue de fibra óptica y la ampliación de capacidades.
¿Qué se plantea?:
◦ Metas del PNT en Despliegue de Infraestructura Fija:
▪ D
esplegar 16.000 km de fibra óptica para nuevas redes de transporte, para el año 2025 (5.000 km en 2023, 5.000 km en 2024, 6.000 km en 2025).
▪ Iluminar 7.000 km. de la red OPSUT con capacidades de 100 Gbps para el periodo 2023-2025, incluyendo la participación de terceros operadores.
▪ Proveer servicio de internet a 1.800.000 abonados con redes de fibra óptica (FTTH/GPON) para el año 2025.
▪ Desplegar 65.000 km de fibra óptica (FTTH/GPON) de última milla para el año 2025.
▪ Incorporar 75 localidades remotas a la cobertura de redes de telecomunicaciones para el año 2025.
▪ Desarrollar un marco legal normativo para el Punto de Intercambio de Tráfico de Venezuela (IXP-VE) en 2023, y conectar a 30 operadores regionales para 2025.
▪ Establecer un marco jurídico para la regulación y medición de parámetros de calidad de internet en 2023, iniciando mediciones en 2024.
◦ La Comisión Nacional de Telecomunicaciones y las alcaldías deben coordinar la fiscalización para asegurar el cumplimiento de las normas técnicas y de seguridad, incluyendo la correcta identificación de cables (La fibra subterránea lleva identificado qué operadora “va por ahí», con etiquetas específicas) y la eliminación del cableado en desuso.
◦ Se deben ofrecer incentivos para la inversión subterránea, como beneficios fiscales o facilidades. CANTV es un actor fundamental, pues «toda la tanquilla es de CANTV», y son quienes asignan inspectores y aprueban los proyectos subterráneos.
◦ Las municipalidades deben informar a la población sobre las zonas y fechas de intervención para el retiro de cableado obsoleto, lo que contribuye a la seguridad vial y a la mejora del paisaje urbano.
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Responsabilidad y Colaboración de las Operadoras:
◦ Las empresas deben invertir en la calidad de la instalación, capacitando a su personal y utilizando materiales adecuados para garantizar despliegues seguros y duraderos.
◦ Es vital fomentar y regular el uso compartido de la infraestructura pasiva, como ductos subterráneos y postes, en lugar de que cada empresa instale su propio cableado. Esto reduciría el desorden y los costos, aprovechando la experiencia previa de CANTV en la interconexión y alquiler de su fibra.
◦ Deben establecerse planes de mantenimiento proactivos para sus redes. Mientras se aprueba un proyecto subterráneo, que puede tomar de dos a tres meses, las operadoras pueden ofrecer «una solución aérea en este momento». También deben evaluar el potencial de crecimiento para recuperar la inversión en infraestructura, como la instalación de NAPs (Network Access Points), que permiten conectar la fibra a los clientes.
◦ Las empresas de telecomunicaciones son entidades involucradas en la ejecución del PNT, lo que implica una responsabilidad compartida para alcanzar los objetivos del plan.
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Participación de la ciudadanía:
◦ Los ciudadanos pueden denunciar el cableado en mal estado o instalaciones peligrosas ante la Comisión Nacional de Telecomunicaciones y ante las alcaldías. Algunos clientes ya han tomado la iniciativa de invertir en cableado subterráneo en sus propiedades, para evitar el tendido aéreo.
◦ El PNT incluye el fomento de espacios de innovación tecnológica con organizaciones de usuarios y usuarias, y programas de alfabetización tecnológica, lo que puede empoderar a la ciudadanía para una participación más informada.
Conclusión: Hacia un Futuro Digital Ordenado
La proliferación del cableado aéreo en Venezuela es un síntoma de una infraestructura en evolución y de la necesidad de una regulación y planificación adecuadas. El Plan Nacional de Telecomunicaciones 2023-2025, al plantear una ambiciosa hoja de ruta para el despliegue de infraestructura fija y la mejora de servicios, ofrece un marco para reorientar esta expansión.
OJO: La solución no radica en prohibir el despliegue de fibra óptica, sino en ordenar y regular su crecimiento de forma segura, sostenible y planificada; y, por supuesto, con una mayor coordinación entre los entes públicos (incluyendo los que el PNT menciona como responsables de su ejecución, como el Ministerio del Poder Popular para la Comunicación e Información, CONATEL, Alcaldías y otros ministerios), los privados y la activa participación de la ciudadanía, podemos transformar esta «telaraña digital» en una red eficiente, segura y estéticamente integrada en nuestras ciudades, en beneficio tanto de los usuarios como del entorno urbano.
La colaboración es la clave para un futuro digital ordenado y para la construcción de la soberanía tecnológica del país.
(RG)
