Al menos 32 personas fallecieron y 24 continúan desaparecidas a raíz de las graves inundaciones y corrimientos de tierra que azotaron varias regiones del sur y el este de Filipinas el pasado fin de semana, informó este jueves la agencia para desastres naturales.
La región con más víctimas es Mindanao Septentrional, al norte de la sureña isla de Mindanao, donde 18 personas perecieron, nueve resultaron heridas y una persona continúa desaparecida, conforme a la última actualización del Consejo Nacional para la Gestión y Reducción del Riesgo de Desastre.
El resto de víctimas mortales se registraron en la región costera de Bicol, en el sureste de la isla de Luzón -la más habitada del país-, donde 6 personas perdieron la vida, Visayas Oriental (3), Zamboanga (4) y Caraga (1), estas dos últimas también en Mindanao.
En su última actualización, el equipo nacional de emergencias indicó que, además, al menos 24 personas siguen desaparecidas: 11 de ellas en Bicol; otras 11 en Visayas Oriental; una en Zamboanga y otra en Mindanao Septentrional.
Asimismo, unas 56.110 personas se encuentran en centros de evacuación, de las más de 486.000 que se vieron afectadas por las precipitaciones.
El desastre empañó las celebraciones de Navidad en la nación con mayor número de católicos de Asia, donde cientos de miles de filipinos se desplazan desde los núcleos urbanos a las provincias durante estas fechas.
Filipinas, que es golpeada cada año por entre 15 y 20 ciclones, está clasificada entre las naciones más vulnerables a los impactos del cambio climático.