Se trata de un proyecto financiado por el Fondo Nacional de Ciencia y Tecnología, en la hacienda La Bendición, ubicada en la parroquia Trinidad Samuel, municipio Torres del estado Lara, el cual consiste en disminuir los efectos del cambio climático en la ganadería y la agricultura.
Es ejecutado por la Fundación Nadbio, cuyo presidente, Andrés Kowalski, explicó que el proceso se basa principalmente en acumular la materia orgánica en el suelo. Agregó que en la Hacienda La Bendición y sus alrededores las precipitaciones son muy pocas, por lo que generalmente cuentan con nueve meses de una completa sequía.
«Como aquí no llueve, la acumulación de materia orgánica en el suelo a través de las plantas y la presencia del ganado, nos permite que el suelo vaya regenerándose y vaya teniendo mayor acumulación de agua», enfatizó Kowalski.
Acotó que cuando llueve, el agua se infiltra y para que las plantas puedan acumular la materia orgánica que efectúa el proceso de captura del dióxido de carbono (CO2) que se encuentra en la atmósfera.
Kowalski contabilizó que por cada hectárea -de 300- que maneja la hacienda en ganadería regenerativa, tienen la oportunidad de acumular entre 16 y 20 toneladas de dióxido de carbono.
«Esto es importantísimo porque la materia orgánica trae retención de humedad, mejora la fertilidad del suelo, ya que las aguas no se escurren, ahora se infiltran y la poca que cae las capturamos para que sean usadas por las plantas y las que no se usan pasan directamente hacia los acuíferos para que puedan ser usadas en otros sistemas», finalizó.
Desde la Hacienda La Bendición, el gobernador del estado Lara, Adolfo Pereira, junto a Salvador Lugo, viceministro para la Comunalización de la Ciencia y Kowalski, informaron sobre el proyecto, el 30AGO.
Pereira detalló que la entidad larense cuenta con una producción de más de 190 millones de litros de leche de vaca, de los cuales más de 130 millones de litros se originan en Carora.
Foto: Gobernación de Lara
