Andrew Garfield habla sobre cómo enfrentarse a la «politización mormona» durante la investigación de «Under the Banner of Heaven»
IndieWire está realizando una sección de entrevistas debido a que se acerca los premios Emmys, en dicha sección han destacado a las actuaciones y direcciones más memorables, una de ellas ha sido la del reciente nominado al Óscar, Andrew Garfield, quien está actuando en la miniserie de FX, «Under the Banner of Heaven».
Para interpretar a Jeb Pyre, el detective de Utah en la miniserie, cuya investigación de un doble asesinato amenaza con desentrañar su familia y su fe mormona, Garfield se dirigió directamente a la fuente: el campus de la Universidad Brigham Young.
«Para recoger un optimismo casi aterrador que salía de estos jóvenes estudiantes mormones, tuve que morderme mucho la lengua», dijo Garfield a su director (y antiguo mormón), Dustin Lance Black.
«¿Hubo retroceso, o te encontraste con ‘mormones educados’?» preguntó Black.
Me encontré con la «cortesía mormona», dijo Garfield.
Black pasó casi una década intentando -y fracasando- adaptar el bestseller de no ficción de Jon Krakauer como un largometraje. El éxito sólo llegó después de que Black hiciera dos cosas: dejar que la película se convirtiera en una miniserie y crear un personaje principal que no aparece en el libro.
Mientras que los detectives de Utah pasaron años en el trágico caso de Brenda Lafferty y su pequeña Erica, Jeb Pyre no se basa en una persona. En cambio, mientras Pyre se enfrenta a la fe que llevó a dos hombres a creer que Dios les había ordenado cometer dos brutales asesinatos, deja que el público experimente el intenso conflicto entre la fe y los hechos que se explora en el libro de Krakauer.
«Era mi pregunta al final de haberlo leído, y creo que es la pregunta de Pyre al final de esta serie: «¿Y ahora qué?»». dijo Black. «‘He salido de la cueva, he salido de la oscuridad, tengo una mejor comprensión, ¿ahora qué hago con esto?».
Garfield dijo que apreciaba la lucha de Pyre, calificando su representación como «un regalo». Un conflicto tan convincente e intrínsecamente actuable y jugable», dijo. «Se preocupa tanto por su fe y su iglesia, se preocupa tanto por su mujer, sus hijos… su futuro imaginado en el ‘Reino Celestial’ con su mujer y sus hijos nacidos y por nacer. Todo esto se desmorona dentro de él simplemente como un subproducto de hacer su trabajo».
