Enterrada en la demanda antimonopolio de 88 páginas presentada por el Departamento de Justicia de EE.UU. contra Apple hay una referencia al sistema de proyección de teléfono favorito de todos, CarPlay.

El DOJ afirma que, al igual que los teléfonos inteligentes, los sistemas de infoentretenimiento para vehículos se han convertido en una nueva forma en que Apple ejerce comportamiento anticompetitivo para perjudicar a los consumidores y a sus competidores.

Los planes de Apple de introducir una versión más inmersiva de CarPlay, en la que el sistema muestra aspectos clave de las funciones del vehículo como la velocidad y el HVAC, son evidencia adicional del monopolio ilegal de la empresa sobre los teléfonos inteligentes, según los fiscales.

«Incluyendo CarPlay, así como las funciones de llave digital a través de la función Wallet de Apple, sorprendió a algunos analistas, quienes dicen que el DOJ puede estar malentendiendo la utilidad y las funciones del sistema de proyección de teléfono.»

«Esto es especialmente cierto para la versión de próxima generación, que los fiscales describieron insidiosamente como tomando ‘control sobre todas las pantallas, sensores e indicadores en un automóvil, obligando a los usuarios a experimentar la conducción como una experiencia centrada en el iPhone si quieren usar alguna de las características proporcionadas por CarPlay'».

«Es engañoso», dijo Sam Abuelsamid, analista principal de Guidehouse Insights y experto en software para vehículos. «Incluso con el sistema de próxima generación, los fabricantes de equipos originales no tienen que permitir que Apple tome el control de todas las pantallas», dijo en un correo electrónico. «Pueden limitar la interfaz a las pantallas que deseen».

Los fabricantes de automóviles aún necesitan construir una interfaz de software básica para que los propietarios de vehículos puedan ajustar su aire acondicionado, cambiar la estación de radio u operar mapas de navegación nativos, dijo Abuelsamid. No pueden asumir que cada propietario de vehículo tenga un teléfono inteligente, y mucho menos un iPhone, que proyectarán en la pantalla de infoentretenimiento de su automóvil. Y el automóvil debe poder funcionar en ausencia de un teléfono inteligente.

CarPlay de Apple es inmensamente popular, con amplias franjas de estadounidenses citándolo como un ‘imprescindible’ para futuras compras de automóviles.

La tecnología de llave digital de Apple cumple con los estándares establecidos por un consorcio interindustrial de fabricantes de automóviles y empresas de tecnología, señala Abuelsamid. Sin embargo, la empresa ha sido ‘tacaña’ con el acceso a sus chips NFC y UWB, y sus requisitos de que operen a través de Apple Wallet probablemente tengan más impacto en otras aplicaciones de pago que en las aplicaciones desarrolladas por la industria automotriz.

Mike Ramsey, vicepresidente de Gartner, dice que si Apple hace que las llaves digitales funcionen realmente bien, podría ser una victoria para los consumidores a pesar de infringir la ley.