Esta decisión promete abrir nuevas oportunidades para los desarrolladores de emuladores, especialmente aquellos que ya operan en la plataforma Android. Durante mucho tiempo, los propietarios de iPhones han estado limitados en cuanto a la disponibilidad de emuladores de juegos retro, lo que los ha llevado a buscar alternativas a través del jailbreaking u otros métodos. Ahora, con esta apertura de Apple, los usuarios podrán disfrutar de una amplia gama de juegos clásicos en sus dispositivos iOS de manera legal y segura.
Pero esta no es la única actualización importante que trae consigo Apple. Además de las reglas sobre emuladores, la compañía ha modificado sus políticas con respecto a las «súper aplicaciones», como WeChat. Ahora, se requiere que los mini-juegos y mini-aplicaciones dentro de estas aplicaciones utilicen HTML5, lo que significa que no podrán ser aplicaciones nativas.
Esta acción parece ser una respuesta directa a las críticas y demandas antimonopolio presentadas por los Estados Unidos y la Unión Europea. Se acusa a Apple de intentar sofocar tanto las aplicaciones de transmisión de juegos en la nube como las súper aplicaciones, y estas actualizaciones parecen ser un intento de abordar esas preocupaciones.
Por último, Apple también ha cedido ante la presión de la Comisión Europea al permitir que las aplicaciones de transmisión de música incluyan enlaces a compras externas y mencionen información de precios. Esto viene después de que la Comisión calificara las reglas de anti-redirección de Apple como «ilegales», lo que generó controversia con gigantes del streaming como Spotify.
En resumen, estas actualizaciones significan un cambio significativo en la política de la App Store de Apple y podrían tener un impacto duradero en el panorama de las aplicaciones móviles. Sin embargo, queda por ver cómo responderán los desarrolladores y los usuarios a estos cambios, especialmente en lo que respecta a la libertad de elección y la competencia justa en el mercado de aplicaciones.