El huracán Fiona se dirige este lunes 19 de septiembre, hacia República Dominicana tras golpear Puerto Rico con inundaciones, deslaves y cortes de luz. El gobernador del territorio estadounidense describió los daños como “catastróficos”.
No se reportaron muertes, aunque las autoridades dijeron que era demasiado pronto como para valorar el alcance de los daños de una tormenta que aún dejaría lluvias torrenciales en todo Puerto Rico el lunes.
Las previsiones eran de hasta 76 centímetros (30 pulgadas) de agua en las regiones oriental y sureña de la isla.
“Es importante que la gente comprenda que esto no ha terminado”, dijo Ernesto Morales, meteorólogo del Servicio Nacional de Meteorología en San Juan. Las inundaciones habían alcanzado “niveles históricos”, señaló, y las autoridades evacuaban o rescataban a cientos de personas en toda la isla.
“Los daños que estamos viendo son catastróficos”, dijo el gobernador, Pedro Pierluisi.
Un torrente marrón fluía por las calles, en las casas e incluso por una pista de aeropuerto en el sur de Puerto Rico.
Fiona también arrancó el asfalto de algunas calles y se llevó un puente en la localidad central de montaña de Utuado, que según la policía había instalado la Guardia Nacional después de que el huracán María impactara en 2017 como tormenta de categoría 4.
El vórtice de Fiona estaba 85 kilómetros (50 millas) al sureste de Punta Cana, República Dominicana, con vientos máximos sostenidos de 140 kilómetros (85 millas) el domingo por la noche, según el Centro Nacional de Huracanes. Se desplazaba hacia el noroeste a 15 kilómetros (9 millas) por hora.
El meteoro llegó en el aniversario del huracán Hugo, que azotó la isla en 1989 como tormenta de categoría 3.
Mientras las autoridades seguían evaluando los daños de Fiona, muchos se preguntaban cuándo se reanudaría el suministro eléctrico.
Fuente: AP