Una misteriosa bola de metal ha aparecido en una playa de Japón, y las autoridades la están investigando con la esperanza de averiguar de dónde procede y qué es.
De acuerdo, sabemos más o menos lo que es: una bola de metal oxidado de 1,5 metros de diámetro que parece haber aparecido en la playa.
Lo que la gente sigue tratando de averiguar es para qué sirve esta extraña bola, que tiene unos añadidos en forma de asa, por lo que parece que podría estar unida a algo, y la gran pregunta es qué podría haber sido ese algo.
La bola fue hallada en la playa de Enshu, en Tsuboi-cho, Nishi-ku, Hamamatsu, el 21 de febrero hacia las 9 de la mañana, hora local.
El suceso fue denunciado a las autoridades por una mujer que paseaba con su marido por la playa tras ver la gran bola de metal en la arena y sospechar de ella.
Los temores iniciales de que se tratara de una mina marina que pudiera explotar y causar graves daños a los curiosos se disiparon después de que las radiografías de la bola revelaran que estaba hueca.
Los que pensaban que se trataba de algún tipo de artefacto enviado por China o Corea del Norte también pueden dejar de preocuparse, ya que, según los medios locales, no es probable que se trate de algo que intente espiar a la gente.
Las autoridades siguen tratando de averiguar qué es esta bola y han levantado un perímetro de 200 metros alrededor de ella para evitar que nadie se acerque demasiado.
Expertos en explosivos con ropa protectora han podido examinar la bola y, afortunadamente, no parece que corra riesgo de estallar.
Por el momento, podría tratarse simplemente de una gran bola de metal que estaba sujeta a algo en el mar, pero que se soltó de algún modo y acabó llegando a la playa, aunque la gente se divierte especulando sobre lo que podría ser en realidad.
Algunos se preguntaban si se trataba de un ovni, mientras que otros bromeaban diciendo que, por el color naranja de la bola de metal oxidado, era en realidad uno de los legendarios artefactos de la serie de manga Dragon Ball.
Un lugareño, asiduo de la playa de Enshu, declaró a la cadena pública NHK que no entendía a qué venía tanto alboroto, ya que «llevaba allí un mes».
También dijo que había intentado moverla él mismo empujándola, pero que «no se movía».
Tiene sentido, ya que incluso una bola de metal hueca sería difícil de mover cuando está encajada en la arena, pero sigue planteando la pregunta de cómo acabó en la playa y de dónde vino originalmente.
ENLACE ORIGINAL: Japanese officials investigate mysterious ball washed up on beach (unilad.com)
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