Rihanna congregó a 118,7 millones de espectadores en su espectáculo del descanso de la Super Bowl, según cifras preliminares.
Es una cifra enorme por sí sola, pero resulta que fueron cinco millones de personas más que el propio partido.
La modelo Cara Delevingne fue vista en la final de la NFL con una camiseta de la marca Fenty de Rihanna que resumía a la perfección el ambiente del día.
La modelo, de 30 años, compartió una foto en las redes sociales en la que aparecía junto al campo con la camiseta en la que se podía leer: «Concierto de Rihanna interrumpido por un partido de fútbol, raro pero da igual».
Poco sabíamos todos lo ciertas que resultarían ser esas palabras.
Según datos preliminares de Nielsen Media proporcionados por Fox a Forbes, unos 107 millones de estadounidenses vieron la retransmisión televisiva de la final de fútbol americano.
Otros seis millones sintonizaron las plataformas de streaming.
La audiencia global total fue de 113 millones, superando la del año pasado en un millón de espectadores.
Sin embargo, no alcanzó el récord de audiencia de la Super Bowl, que fue de 114,4 millones en 2015.
El épico espectáculo de medio tiempo de Rihanna tuvo una media de 118,7 millones de espectadores.
Esto supone un aumento del 15% respecto a los 103,4 millones de audiencia media del espectáculo del descanso de 2022, en el que actuaron Dr. Dre, Snoop Dogg, Eminem, Mary J. Blige, Kendrick Lamar y 50 Cent.
Ese es el tipo de poder de estrella que Bad Gal RiRi aporta por sí sola.
El espectáculo supuso la primera actuación de Rihanna en cinco años, lo que probablemente tuvo mucho que ver con el porcentaje masivo de miradas fijas en el Halftime Show de la Super Bowl LVII del domingo.
En su increíble actuación, la cantante de Barbados, de 34 años, descendió de las vigas vestida con un llamativo traje rojo y flanqueada por un grupo de bailarines.
A continuación, deleitó a los miles de espectadores presentes en el estadio y a los millones que la seguían desde sus casas con un popurrí de sus éxitos, entre ellos «We Found Love», «Diamonds», «Rude Boy», «Umbrella» y «Work», por citar sólo algunos.
Pero no todos quedaron impresionados.
Algunos fans en las redes sociales han acusado a la reina del pop de hacer playback durante el espectáculo.
Otros la calificaron de «la peor actuación de la historia» en la Super Bowl.
Una persona comentó: «Increíble cómo Rihanna es capaz de seguir cantando incluso cuando deja el micro a un lado y no mueve los labios en absoluto».
Pero, según la política de la NFL, las estrellas graban previamente sus sets antes del gran espectáculo para tener una opción alternativa en caso de que necesiten concentrar su aliento para coreografías complejas, sets en movimiento y (a veces) cameos sorpresa, informa Fox40.
Así que no es el pecado capital que se quiere hacer ver.
Ah, y por si a alguien le interesa, los Kansas City Chiefs se hicieron con la victoria frente a los Philadelphia Eagles con un resultado final de 38 a 35.
ENLACE ORIGINAL: Rihanna‘s Super Bowl Halftime Show brought in 5 million more viewers than the actual game (unilad.com)
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