El embajador de Venezuela ante Naciones Unidas, Samuel Moncada, anunció el jueves 16Oct, la entrega de una misiva al Consejo de Seguridad y al secretario general, António Guterres, en la que pide al organismo que investigue los bombardeos de Estados Unidos contra embarcaciones en el mar Caribe, que han dejado al menos 27 muertos, y que se comprometa con el respeto a la soberanía y la integridad del país.
En esta carta, la diplomacia venezolana insta al Consejo a que «investigue el conjunto de asesinatos que el Gobierno de Estados Unidos viene perpetrando en nuestra región y determine en su carácter ilegal», según detalló Moncada.
El enviado de Caracas indicó que el documento pide al organismo de la ONU que confirme «la amenaza que representan estas acciones ilícitas para la preservación de la paz en la región de América Latina y el Caribe, entre ellas las ejecuciones extrajudiciales, la concentración de fuerzas militares, la retórica belicista contra Venezuela y las operaciones clandestinas de la CIA para cometer asesinatos», después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, autorizara el miércoles a la agencia de inteligencia en el exterior a operar en el país latinoamericano.
Asimismo, Caracas ha instado al Consejo de Seguridad a «emitir un pronunciamiento en el que reafirme el principio del respeto irrestricto a la soberanía, la independencia y la integridad territorial de Venezuela, como base indispensable para preservar la paz».
Moncada también alertó acerca de la posibilidad, considerada por la Administración Trump, de lanzar ataques en tierra, lo que «sería claramente contrario a las disposiciones del artículo 2.4 de la Carta de Naciones Unidas relativo a la abstención del uso de la fuerza», afirmó.
Además, el diplomático venezolano hizo hincapié en el componente regional de la esgrimida amenaza estadounidense, destacando que «algunas de las víctimas han sido reconocidas por sus familiares y sus gobiernos como nacionales de Colombia y de Trinidad. «Este hecho lo enfatizamos (…) porque indica que afecta a toda la región», subrayó.
«No es un tema nada más venezolano. Lo hacemos nosotros porque las amenazas vienen contra nosotros, pero las víctimas vienen de otros países también», concluyó.
Por su parte, el portavoz de Guterres, Stéphane Dujarric indicó en rueda de prensa que, pese a que el líder de la ONU aún no ha recibido la misiva, sí es consciente del envío de la carta, y ha insistido en que «es imperativo que los Estados miembros se aseguren de que sus acciones se lleven a cabo de conformidad con el Derecho Internacional, incluida la Carta de las Naciones Unidas».
