El cártel mexicano del Golfo ha pedido disculpas y ha entregado a cinco de sus miembros tras el terrible secuestro en el que murieron dos ciudadanos estadounidenses la semana pasada.
Cuatro estadounidenses fueron secuestrados el viernes 3 de marzo en Matamoros, ciudad fronteriza con México, cuando unos hombres armados abrieron fuego contra su coche y los subieron a la parte trasera de una camioneta.
Según las autoridades, los secuestradores dejaron a sus víctimas en varios lugares para «crear confusión y evitar los esfuerzos de rescate», pero fueron encontradas el 7 de marzo en una cabaña de madera a las afueras de Matamoros.
El Grupo Escorpiones, una facción del cártel del Golfo, ha pedido disculpas por el secuestro a plena luz del día y ha decidido entregar a los miembros presuntamente implicados.
Una fotografía de los cinco hombres presuntamente responsables del secuestro se ha publicado hoy (10 de marzo) en la portada de los periódicos mexicanos.
En la foto, los hombres aparecen tumbados boca abajo, con las blusas subidas por encima de la cabeza y las manos atadas a la espalda, que es como al parecer los encontró la policía cuando llegó al lugar de los hechos.
Al parecer, el grupo Scorpions también dejó una carta en el lugar de los hechos, que Associated Press ha recogido posteriormente.
En la carta se explicaba que los cinco miembros habían «actuado bajo su propia decisión y falta de disciplina» cuando atacaron a los cuatro ciudadanos estadounidenses.
En ella se acusaba a los cinco hombres de infringir la norma del cártel del Golfo de «proteger la vida de los inocentes».
También pedían disculpas al pueblo de Matamoros, a las víctimas y sus familias, y a la mujer mexicana que murió cuando abrieron fuego.
Matamoros, cerca de la ciudad fronteriza de Brownsville (Texas), se ha convertido en una zona clave para la guerra en curso del cártel del Golfo contra los Zetas rivales.
Las cuatro víctimas, Latavia «Tay» McGee, Shaeed Woodard, Zindell Brown y Eric James Williams fueron trasladadas para recibir tratamiento cuando fueron encontradas esta semana, pero dos de ellas -Woodard y Brown- fallecieron.
McGee y Williams han sido trasladados desde entonces a hospitales estadounidenses.
El FBI confirmó que «una de las víctimas supervivientes sufrió heridas graves durante el ataque».
La esposa de Williams, Michele Williams, declaró posteriormente a la CNN que su marido había recibido dos disparos en una pierna y uno en la otra.
Reuters informa de que las fuerzas de seguridad mexicanas están investigando si los miembros de Escorpión habían confundido a los cuatro ciudadanos estadounidenses con miembros de un cártel rival, dado que los cuatro tenían condenas anteriores por delitos relacionados con el narcotráfico.
En relación con el devastador atentado, el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, declaró esta semana: «Lamentamos mucho que esto haya ocurrido en nuestro país y enviamos nuestras condolencias a las familias de las víctimas, a los amigos y al gobierno de Estados Unidos, y seguiremos haciendo nuestro trabajo para garantizar la paz y la tranquilidad».
ENLACE ORIGINAL: Mexican cartel apologizes and turns in 5 members involved in deadly kidnapping of Americans (unilad.com)
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