El Día Nacional del Cronista en Venezuela
Como Cronista de la Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado, nos es altamente satisfactorio referirnos al Día Nacional del Cronista en Venezuela, que desde el año 1986, está instituido en nuestro país, de conformidad con lo acordado en la XVIII Convención Anual de la Asociación de Cronistas de Venezuela celebrada en Punto Fijo, estado Falcón, donde se escogió el 20 de mayo en Homenaje y Memoria del “Cronista Mayor”, como se le conoce a Enrique Bernardo Núñez (Valencia: 20 de mayo de 1895 – Caracas: 1 de octubre de 1964), por ser la fecha del natalicio de quien fuese el primer Cronista Oficial nombrado específicamente en Venezuela, al haber sido designado formalmente como el Cronista de Caracas en 1945, cargo que desempeñó hasta el momento culminante de su vida en 1964.
En cuanto a la labor del cronista, nos acota el Dr. Alberto Castillo Arráez (1963) que:
“…La menuda historia – por menuda no menos importante – necesita del artífice que la recoja y narre con pasión. Venezuela tiene sus historiadores románticos de la gran gesta, a lo Eduardo Blanco, o analistas de interpretación científica del devenir patrio a lo José Gil Fortoul, para solo citar dos. Pedro el acontecer diario de las ciudades, la anécdota aparentemente intrascendente, la acotación de horas gratas unas veces, heroicas otras, humorísticas las más, pasan sin homérico narrador u observador filosófico que la registre y las interprete. En ese momento nace el cronista citadino para anotar el cotidiano pasar, y por un escamoteo de la inteligencia inmovilizarlo – dándole categoría de perennidad – en la página narrativa que es impronta de un tiempo donde lo domestico, lo social, lo artístico, el folklore y hasta el hecho trágico tienen cabida. Porque toda ciudad en cada día de su historia tiene sus múltiples dramas – entendiendo por drama la acción en sentido griego – hasta las horas aparentemente letárgicas de las interioranas villas del vasto territorio venezolano. (…) la categoría del cronista es más vital. Vive y escribe lo vivido. (…) O sea aquello que le da autenticidad – identidad de ser – a un ambiente cualquiera. Ello es la realidad radical de su historia, realidad que es registrada por el cronista. Viene así éste a ser en puridad, el verdadero historiador, el de total veracidad – en sentido directo – porque relata su propia e indubitable experiencia que se identifica con el auténtico acontecer porque ha sido percepción de la realidad vivida…”
Indudablemente que el Dr. Alberto Castillo Arráez, en su interpretación filosófica del cronista, nos deja una singular apreciación con la cual comulgamos, ya que de la misma forma igualmente nos acota:
“…Pero la crónica es un arte y una ciencia. Como arte, en sentido kantiano, va dirigida a la sensibilidad. En consecuencia hay una estética de la narración. En pocas palabras debe ser bella y a la vez emocional, puesto que los valores estéticos en el orden de Max Scheller, se dan por vía del sentimiento. Hay pues, un arte de narrar. (…) Por otra parte es ciencia, puesto que para interpretar los hechos se requieren bases filosóficas, sociológicas, geográficas, psicológicas, económicas y hasta disciplinas gramaticales para que resulten verídicos desde un punto de vista histórico…”
El Dr. Alberto Castillo Arráez, fue un intelectual barquisimetano muy apreciado en nuestro medio local y reconocido en el medio nacional, por sólo apenas hacer atisbo de su vida y obra más allá de su descollante personalidad intelectual, que recordamos como si fuese ayer, pronunciando el emocionante y emocionado discurso de la inauguración de la Plaza Los Ilustres, donde hizo vibrar con su palabra la fibra más sensible del alma de los presentes, haciéndose sentir por sus dotes de hombre integral, amigo de todas las ocasiones y de una rectitud a toda prueba, lo que se decantaba de aquellas expresiones sagradas por puras y por castellanas, con las cuales discurrió llenando de emoción y aristocrático acento aquella tarde que devenía en noche, al hacer magnífica apología de las tres figuras de estilo realista cuyos bustos en el bronce que los inmortalizaba, se develaban en esa ocasión inaugural, siendo éstos Rafael Monasterios, Eligio Macias Mujica y Antonio Carrillo. Esa trilogía del procerato civil a que se refería Castillo Arráez, significó el enaltecimiento de ciudadanos que más allá de la acción encumbrada de ejecutorias rimbombantes, tuvieron un desempeño que en su quehacer cotidiano, fueron factores de elevación de la ciudad y su gente hacia un mejor porvenir, sobre todo desde el vértice de la cultura, además de significar igualmente la importancia que tiene este tipo de iconografía estatuaria en una ciudad, donde quiera que se encuentren.
En fin, el Dr. Alberto Castillo Arráez nos señala igualmente:
“…Triple realidad la del cronista: ser artista, ser científico, ser historiador. Aparte de estas múltiples naturalezas del cronista este se enfrenta con un destino físico cuya hermeneútica es precisamente interpretarlo. Entonces comienza su tarea de cíclope intelectual para eternizar en la letra lo que es kaleidoscópico, amplio y variado. Únicamente la visión entusiasta de las cosas, por parte del narrador, puede dar la panorámica exacta e histórica de una ciudad…”
Así prologaba el Dr. Alberto Castillo Arráez, el libro “Sol en las Bardas” de Eligio Macias Mujica, el primer Cronista Oficial de la ciudad de Barquisimeto, nombrado en mayo de 1950. Este libro fue fruto del incansable afán de don Raúl Azparren por el fomento de la “barquisimetaneidad”, quien gestionó ante el Ejecutivo del estado Lara, a través de la Sociedad Amigos de Barquisimeto, la edición de un compendio de interesantes artículos de Eligio Macias Mujica, nacido en la capital del estado Lara el 4 de mayo de 1900 y fallecido en Caracas el 20 de julio de 1962.
En 1951 el Concejo Municipal, nombró Cronista Oficial al Dr. Antonio Álamo, quien fue el orador de orden en la Sesión Solemne de la Academia Nacional de la Historia conjuntamente con el Centro del Historia Larense, en septiembre de 1952 con motivo de la resaltante celebración de los 400 años de la fundación de Barquisimeto, cuyo acto tuvo lugar en el Teatro Juares, recién remodelado con la fisonomía que luce en la actualidad.
Posteriormente, ese mismo año de 1952 se volvió a designar como Cronista Oficial de Barquisimeto a Eligio Macias Mujica, quien se desempeñó como tal hasta su deceso en 1962. Seguidamente, fue nombrado Cronista Hermann Garmendia de nuestra más grata recordación, periodista, poeta, escritor, historiador, crítico literario, humorista, editor e intelectual de sobresaliente actuación, reconocida regional, nacional e internacionalmente. Hermann Rafael Garmendia Graterón, nació en Barquisimeto el 7 de junio de 1917 y falleció en la misma ciudad crepuscular el 24 de mayo de 1990 y para quien prestamos servicio como Secretario por espacio de tres años hasta el momento culminante de su vida. Lo asistimos en la preparación de la página “Cronica de la Nostalgia” que se publicó durante varios años en el Diario El Informador y que luego de su partida, continuamos como “Reseña de la Añoranza” hasta el presente, en la prolongación de ofrecer una pincelada semanal del devenir a través del tiempo, de “…el país, la ciudad y su gente…”, como se titulaba la página del siempre recordado con admiración y aprecio Manuel Felipe López vecina a la nuestra.
Hermann Garmendia produjo incontables trabajo para periódicos y revistas regionales, nacionales e internacionales, dejando para la posteridad una serie de publicaciones tales como: “Tamborcillo de la Farándula”, “Algo sobre el Gran Mariscal”, “Sociología Pintoresca de Barquisimeto”, “100 Años de la Divina Pastora”, “En un momento de locura”, “María Lionza, diosa del amor y la fortuna”, “María Lionza, ángel o demonio”, “Barquisimeto del Recuerdo”, “Barquisimeto hasta el Novecientos”, “Las Mocedades de Páez”, “Eustoquio Gómez, un General de la Rehabilitación”, “Resumen Histórico de nuestra Institución Politécnica”, “Estampas de Humor Criollo”, “Así nació Barquisimeto”, “Héroes del Estado Lara”, “Cuando el Conquistador Juan de Villegas” y “Preguntas y Respuestas” entre otros.
Seguidamente fue nombrado Cronista de Barquisimeto don Ramón Alberto Querales Montes, el más significativo de los Cronista que a nuestro parecer ha tenido Barquisimeto y con que ha contado Venezuela por múltiples circunstancias, especialmente por su pasión por la literatura, la poesía, la historia, la reivindicación del cargo de cronista, cuya relevancia gracias a él quedó tipificada primero en la Ley Orgánica de Régimen Municipal y luego en la Ley Orgánica del Poder Público Municipal y como era destacado en él, su inmenso e inquebrantable amor por el país. Vio la luz primera, el 4 de mayo de 1937, al noroeste del estado Lara, en la población de Matatere y falleció en Barquisimeto el 22 de octubre de 2015.
Recordamos el memorable 24 de abril de 1991, cuando se juramentaba en el Salón de Sesiones del Centro de Historia Larense, don Ramón Querales, en un acto constituido por una Sesión Especial del Concejo del Municipio Autónomo de Iribarren, que presidía el entonces Alcalde, Dr. Raúl Colmenárez. La Cámara Municipal ese día sesionó en pleno, en la segunda planta de piso de madera de la antigua edificación, con la presencia de autoridades y personalidades representativas de diversos sectores de la comunidad, reunidos en torno al escritor e historiador, en el momento cuando era distinguido con el nombramiento de Cronista Oficial del Municipio Iribarren, como reconocimiento a 25 años dedicados a la historia, la investigación literaria y documental del estado Lara.
Para 1991, cuando Ramón Alberto Querales Montes fue nombrado Cronista Oficial del Municipio Iribarren, contaba con una estupenda estela de realizaciones, que compendiaban entonces, más de treinta años de producción investigativa y poética, cuyo legado se contabiliza hoy día, en más de 72 obras entre libros y folletos, alguno inéditos aún, que quedaron en espera de la oportunidad para su edición impresa, entre los que vieron la luz pública “Barquisimeto en un canto de los poetas”, “¿Dónde nació Juan Guillermo Iribarren?”, “A orillas del principio” dedicado a la nación ayamán, “Bibliografía y Hemerografía del Estado Lara (1557-1983)”, “Poesía y Narrativa larense”, “Cronología Documentada del teatro Juares”, “Nomenclaturas de Barquisimeto”, “El Grupo Teatral Lara”, “Apuntes para la Historia del Municipio Iribarren” y muy especialmente a nuestro juicio, “Reparaciones a la Historiografía del estado Lara” una obra cuya importancia es realmente medular, ya que viene a desmitificar una gran cantidad de desafortunados errores historiográficos, fruto del romanticismo de una mitología épica grandilocuente, de donde se ha generado una producción histórica imperfecta y parcial, muchas veces mito, leyenda o fraude consecuencia de algún desventurado momento de nuestra historiografía, copiada y reproducida con desprevenida ingenuidad hasta los actuales días, como el supuesto baile ofrecido al Libertador Simón Bolívar en su breve estadía en Barquisimeto en 1821.
Ramón Querales, en las palabras que pronunció cuando fue juramentado como Cronista Oficial del Municipio Iribarren expresó el hecho de asumir con humildad el compromiso: “…lo cual debe entenderse no como una lacayuna actitud frente a los poderes y frente a los criterios de autoridad, sino mentalidad abierta, espíritu desnudo que ni prejuzga ni adopta dogmas, visión amplia para distinguir en la prueba del documento el contenido prejuicioso o banderizado que sólo es una parte de la verdad histórica…”
Querales, en esa ocasión, no dejó pasar la oportunidad para enfatizar en sus palabras, que no se sumaría a “…quienes pretenden enmascarar y utilizar la historia para sus propios beneficios…” puesto que para él la historia regional “…no puede seguir siendo fácil recurso para disfrazar nuestro pasado y mortificar el presente, sino instrumento fundamental para reconocernos bien y construir nuestras propias ideas, planes de la vida social, con bases firmes, auténticas raíces, sin saltos en el vacío, continuación superior de la vida de un pueblo iniciada en los fondos lejanos de la prehistoria cuyas características principales apenas empezamos a conocer, enriquecida con los aportes de cada generación en el transcurso de los siglos…” Finalizaba sus palabras aquel memorable día: “…Me apoyaré en aquel consejo de Alonso Quijano, mi señor don Quijote de la Mancha, que dio a su fiel escudero, nuestro inefable hermano Sancho Panza: “…procura descubrir la verdad por entre las promesas y dádivas del rico como por entre los sollozos e importunidades del pobre…” Solemnemente me comprometo…”
En el Foro del Diario El Informador, hecho por Ivonne Briceño (1991) con motivo de su juramentación como Cronista expresó: “…No son estos los mejores tiempos para trabajos de la cultura y la historia, porque vivimos días de connotadas indecencias, de prominentes bellaquerías que sacuden inmisericordes la tranquilidad moral de la patria y se muestran como si ellos expresaran la real conducta de los venezolanos…”
Luego de la jubilación por años de servicio a la administración pública de don Ramón Querales, fue nombrado Cronista Oficial del Municipio Iribarren Edilio López Peña, quien fue juramentado por la Cámara Municipal el 14 de noviembre del año 2013, sin necesidad de una junta calificadora como se había venido haciendo y sin necesidad de credenciales, dada la reforma que se hizo a la Ordenanza que normaba la designación del Cronista.
En este orden de ideas, el Cronista Oficial del Municipio Iribarren, es oriundo de San Luis, estado Falcón. Desde 1973 reside en la capital de Lara, y destacan en él los méritos de su militancia en organizaciones políticas como el Partido Comunista de Venezuela (PCV), el Movimiento al Socialismo (MAS), el Movimiento Izquierda Revolucionaria (MIR), y actualmente el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV). De igual forma, se desempeñó como funcionario de Catastro del Concejo Municipal de Iribarren, donde entró en contacto con el devenir histórico de los Ejidos de Barquisimeto, su extensión, ubicación e importancia por localización urbana, penetrando en consecuencia en la historia de la ciudad y las demás áreas que conforman espacialmente al Municipio Iribarren.
La modalidad de los Cronistas Parroquiales, que se viene aplicando desde algunos años ya, contribuye indudablemente a la protección y preservación, enriquecimiento, conservación y restauración del patrimonio cultural tangible e intangible y la memoria histórica se la nación, como lo consagra la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela. Con base a esta perspectiva el Artículo 125 de la Ley Orgánica del Poder Público Municipal nos señala con respecto a las funciones del Cronista Municipal que es: “…quien tendrá como misión recopilar, documentar, conservar y defender las tradiciones, costumbres y hábitos sociales de su comunidad. Deberá ser venezolano o venezolana, mayor de edad, gozar de sus derechos civiles y políticos ser profundo conocedor o conocedora y estudioso o estudiosa del patrimonio histórico y cultural del Municipio…”
Según un estudioso profundo de la materia –como lo fue el profesor Earle Herrera (Citado por Clodovaldo Hernández [2023]) –, la crónica, “en un principio, fue la historia escrita, la relación de los hechos pasados de acuerdo con el orden como sucedieron”. Posteriormente se transformó en un género literario “cuando surge en sus oficiantes la preocupación no sólo por contar, sino por hacerlo bien y en forma amena, clara y agradable para el lector”. Cuando aparecieron los periódicos, esta manera de contar historias saltó con naturalidad a las páginas de éstos “y en ellas encuentra justo albergue porque para el hombre de aquel entonces la crónica es lo que hoy la noticia para nosotros”.
De esta forma, el análisis de Herrera coincide con el de Castillo Arráez al expresar cómo fue que la crónica terminó siendo, un cruce de caminos entre historia, literatura y periodismo.
En la actualidad Barquisimeto tramonta y supera a la aldeana ciudad de ayer, pero que aún pese a todo conserva en algunas partes, comunidades y personas como los cronistas oficiales o no, con erudición metodológica o el más militante amateurismo, los relatos, las historias de sus comunidades, regiones y urbes, manteniendo vivas tradiciones de las más variadas índoles y exaltando la figura de los paisanos ilustres, lo que es fundamental cuando pareciese que vamos perdiendo nuestra saberosa historia típica, mientras vamos perdiendo igualmente la fisonomía de la estampa tradicional de esta ciudad que respira y palpita, con sus angustias y alegrías, con sus triunfos y sus derrotas, siempre con sus brazos abiertos para recibir a todo nuevo viajero, sin que llegue a agotarse su capacidad de albergue, como lo decía Francisco Tamayo (1952) “…si Lara es un punto de convergencias, Barquisimeto, es el crisol que polariza el mestizaje de lo nacional…”
Barquisimeto, Domingo 25 de mayo de 2025.
Fuentes Consultadas:
Briceño, I. (1991, mayo 19) Ramón Querales: Entre la fantasía y la realidad. El Informador, p.1B. Barquisimeto. Venezuela.
Brito, D. (2024) El 20 de mayo se celebra en Venezuela el Día del Cronista. [Artículo en Línea] Disponible en: https://diarioelregionaldelzulia.com/el-20-de-mayo-se-celebra-en-venezuela-el-dia-del-cronista/
Ceballo, G. (2023) Día Nacional del Cronista. [Artículo en Línea] Disponible en: https://ciudadmcy.info.ve/efemeride-dia-nacional-del-cronista
Claudio, I. (1992, septiembre 15). Sesión Solemne en el Concejo. Barquisimeto, 440 años. El Informador, p.5A. Barquisimeto. Venezuela.
Encinoza, E. (2005, septiembre 14) Barquisimeto es una gran ciudad y debemos preocuparnos por cuidarla. El Informador, p.A7. Barquisimeto. Venezuela.
Guanipa, M. (1991, abril 25) Iniciaré un trabajo enciclopédico sobre el Municipio. El Impulso, p.B-8. Barquisimeto. Venezuela.
Hernández, C. (2023) Día del Cronista: cuidar el patrimonio con palabras. [Artículo en Línea] Disponible en: https://www.ciudadccs.info/publicacion/7000-0#:~:text=%2D%20El%2020%20de%20mayo%20se,de%20muchas%20nuevas%20formas%20distintas
Macias. E. (1963) Sol en las Bardas. Imprenta del Estado Lara. Barquisimeto. Venezuela.
Porras, B. (2023) «No son los propagandistas de la institución, sino los vigilantes de la historia menuda» El día del cronista. [Artículo en Línea] Disponible en: https://www.religiondigital.org/baltazar_porras/dia-cronista-medios-comunicacion-informacion-cronica-venezuela_7_2565713418.html
Silva, W. (1999) Anuario Biográfico del Estado Lara. Barquisimeto. Venezuela.
Tamayo, F. (1952) Introducción y Bibliografía del Folklore del estado Lara. Guía Económica y Social del Estado Lara. Editorial Continente. Barquisimeto. Venezuela.
LA
