De acuerdo con reporte del Servicio Sismológico Venezolano (SSV) entre el 22 y el 31 de julio se detectaron 22 sismos en el territorio nacional.
Del total, se esos eventos sísmicos, 16 tuvieron lugar en la región occidental del país, con epicentros l principalmente en el estado Lara, según datos de la Fundación Venezolana de Investigaciones Sismológicas (Funvisis).
Los seis restantes ocurrieron en el estado Sucre, específicamente en las zonas de Irapa y Macuro, con magnitudes que variaron entre 2.2 y 3.9 en la escala de Richter.
Venezuela, como otras zonas de Latinoamérica y el mundo, está expuesta a una elevada actividad sísmica debido a la interacción de las placas tectónicas del Caribe y Suramérica, así como a la presencia de fallas como las de Boconó, El Pilar y San Sebastián.
Hasta el momento, estos sismos, en su mayoría de baja intensidad, no han generado daños ni representado un peligro para la población, reseña Noticia al Día.
Monitoreo constante
Las autoridades científicas continúan con un sistema de monitoreo constante para analizar posibles variaciones en la actividad sísmica, destacando la importancia de que la población permanezca tranquila y recurra únicamente a fuentes oficiales para mantenerse informada. ac
